River eligió un modelo de gestión al momento de encarar los mercados de pases: calidad y no cantidad, además de darle mucha prioridad a los ex jugadores del club. Hace ya un tiempo que la dirigencia puso manos a la obra para tratar de repatriar a varios futbolistas que pasaron por el Millonario, en el corto o mediano plazo, con el objetivo de ponderar aún más el sentido pertenencia y traer nombres probados en la institución.
Las pruebas están a la vista: regresaron Nacho Fernández y Matías Kranevitter en esta ventana de transferencias, mientras que más adelante podrían hacerlo Ramiro Funes Mori, Roberto Pereyra y Manuel Lanzini. Por este último hay sobradas expectativas, dado a que solo pudo ser dirigido por Marcelo Gallardo en un partido, allá por mediados de 2014, y después de eso siguió su carrera lejos de Nuñez.
El talento y la habilidad de Manu cautivó a los hinchas desde el minuto uno en el que irrumpió en Primera División. Con contrato hasta el 30 de junio en West Ham, hay cada vez más posibilidades de que el mediocampista se vuelva a poner la banda roja. "Toda la familia es de River y queremos que vuelva al club que lo vio nacer. Sería un sueño que Manu vuelva a River. Él rechazó ofertas ahora para seguir hasta junio y decidir su propio futuro", reveló Héctor "Machi" Lanzini, su padre, en Radio La Red.
"Manu se quedó con ganas de jugar más tiempo con la camiseta de River. Lo económico no sería un problema, sí lo social y lo inseguro que está el país. Analizaremos a mitad de año, pero yo sería el hombre más feliz del mundo si Manu vuelve a River", completó. Claro, la ilusión de los simpatizantes del Más Grande rápidamente se fue a las nubes...
