Luego de haberle ganado la final a Boca en Mendoza, el conjunto de Marcelo Gallardo cambió la cara, levantó el nivel y logró una gran seguidilla de resultados positivos. Repasá los números en detalle.
Es verdaderamente sorprendente que un triunfo en un Superclásico pueda modificar tanto a un equipo. River tuvo un comienzo de año para el olvido. No sólo no ganaba sino que exhibía errores preocupantes tanto para el Muñeco como para los hinchas.
Antes de la final, que tuvo lugar el miércoles 14 de marzo en el estadio Malvinas Argentinas, La Banda consiguió dos victorias, tres empates y cayó en tres oportunidades. Apenas había hecho ocho goles y también había recibido ocho tantos en contra.
Pero el triunfazo por 2-0 frente al eterno rival, en Mendoza, claramente le cambió la cara: el equipo levantó el nivel y logró una gran seguidilla de resultados positivos. El Más Grande obtuvo seis victorias, un empate y no perdió ni encuentro. Además, convirtió 14 tantos a favor y sólo recibió dos goles.
Sin dudas, esta es una clara muestra de lo importante que es ganar un Superclásico. En el fútbol hay momentos bisagra, que te marcan y te dan un envión anímico muy grande. El River de Gallardo lo está aprovechando al máximo. Ojalá pueda seguir sosteniéndolo.
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