River sabía que Deyverson, el controversial delantero de Atlético Mineiro, era el jugador a prestarle atención en el partido de ida en Belo Horizonte. Prometía hacer de las suyas y las hizo. El hombre de 33 años marcó dos goles, desplegó todo su show de revolcadas, amagues y aprovechó cada uno de los desacoples del fondo del Millonario.
Su forma de jugar irrita a todos los hinchas (vive simulando faltas y también gesticulando hacia la tribuna) pero no se puede quitar de vista que fue la figura de Atlético Mineiro y que River no hizo nada para detenerlo. En medio de su alegría y de los festejos en el MRV Arena, Deyverson fue muy respetuoso para con el Más Grande y hasta lo elogió.
“Mucha humildad. Sabemos que jugar allá va a ser muy difícil contra River, en su estadio maravilloso, con su gente. Éste es un resultado muy bueno pero el fútbol es jugar y no hablar. Vamos a trabajar esta semana, todavía no ganamos nada“, declaró el atacante luego del partido en diálogo con ESPN.
“Estamos con ilusión, respetamos a River, es un gran equipo y tiene una buena afición, pero nosotros estábamos conscientes en que teníamos que hacer este partido“, añadió Deyverson, quien anotó el 1-0 luego de gambetear a Franco Armani y luego puso el 2-0 en el complemento tras culminar un jugadón colectivo.
Al momento de explicar su forma de jugar y la manera que tiene de vivir los partidos, el brasileño trazó un paralelismo con los futboleros rgentinos: “Es parecido a los argentinos, me gusta la ‘cachimba’, cuando voy ganando me gusta hacer tonterías y cuando voy perdiendo me caliento. Yo siempre juego así, pero con respeto, así juego siempre“.