Algo parece haberse roto en la relación entre el hincha y Miguel Ángel Borja. Por lo poco que hizo en el campo de juego durante toda la serie ante Atlético Mineiro y, para muchos, por su falta de compromiso en muchos de los partidos importantes que disputó River este año. Para colmo, anoche el Colibrí estuvo más enfocado en distraer al arquero rival que en cosas más importantes.
Una de las cámaras de la transmisión captó al colombiano caminando dentro del arco, durante el primer tiempo, mientras tomaba agua. ¿Qué hizo? Vio que el arquero Everson tenía un rosario escondido sobre el césped, lo agarró y se lo revoleó lejos, lo que despertó el enojo del guardameta brasileño que se percató de lo sucedido.
Terminado el partido, Everson decidió no irse del Monumental hasta no encontrar el Rosario y lo hizo cuando ya casi no quedaba gente en las tribunas. Se puso a buscarlo junto con dos colaboradores de Mineiro y lo encontró detrás de los carteles electrónicos.
El rosario es tan importante para Everson que hasta le consultaron por él después del partido y el arquero no dudó a la hora de responder: “Lo encontraron y definitivamente estará conmigo en la final. Tuvimos un grupo de trabajo allí para buscarlo y encontramos una pequeña pieza. Sin duda es la parte más importante y me acompañará en la final para poder ganar este título tan esperado“.