“Que placer verte otra vez, nos decimos sin hablar, hoy todo vuelve a empezar y será lo que ya fue” canta Andres Ciro Martinez. Y sí. Habrá que guardar a este lunes 5 de agosto de 2024 en la memoria de las fechas importantes para todo el pueblo millonario. La fecha en la que ocurrió el regreso más esperado por los millones de fanáticos que tiene River Plate. Volvió Marcelo Gallardo. El mejor DT de la historia de este club. El que conoció la gloria eterna. Ese que es estatua. A quien el público adora y ama como a ningún otro. El hincha disfruta cuando lo ve sentado en el banco de suplentes y lo extraña cuando no está.
Su sola presencia es síntoma claro de un cambio de energía. Aquel que andaba enojado, hoy ya no lo está. Quienes no tenían muchas esperanzas para lo que venía, ahora las tienen y en aquellos que aun confiaban, esas expectativas ahora aumentan a límites insospechados. Porque Gallardo tiene magia futbolera y popular. La gente lo puso en un pedestal al que muy pocos pueden acceder. Es quien inventó una era increíble y soñada. El protagonista más importante del período más exitoso y ganador en 123 años de vida de este extraordinario club.
Gallardo es el de las victorias inolvidables pero tambien el de las derrotas con orgullo. Es quien tiene la guardia alta ante el fuego enemigo y ademas el que cree y enseña a creer en los tiempos oscuros. Es la Copa Libertadores 2015 y 2018 y también es la ilusión de ésta del 2024. Gallardo es el elegido de la gente y a esa condición de intocable llegan pocos. Muy pocos.
Marcelo Gallardo volvió a su casa: River
Gallardo es River. Es la manera correcta de interpretar este club. La forma de conducir y de ir siempre por más. De jugar y vivir con grandeza. Lema que describe a esta institución y que el supo representar a la perfección. Solo alguien que nació, creció, se desarrolló y maduró con estos colores puede estar a la altura de semejante status. Es un hijo de la casa tan aceptado, que el hincha ya es feliz sólo con el hecho de tenerlo otra vez. Si hasta da la sensación (por favor que se entienda la metafora) que a veces preferirian perder con Gallardo antes que ganar con otros técnicos. Eso es identificación. Eso es amor genuino y verdadero.
Una vida entera ligada a River
Gallardo y River se vuelven a elegir porque entendieron que no pueden estar separados mucho tiempo. El Muñeco llegó al Club en 1988 y goza de plena vigencia en este 2024. Repasemos. Hizo todo su recorrido en el fútbol amateur hasta debutar en 1993,. Se afianzó en primera, se convirtió en figura y fue transferido al Mónaco de Francia en 1999. Después de 4 años de Europa, volvió a River en 2003 para vivir su segunda etapa como jugador. Se mantuvo hasta el 2006 cuando su entrenador, Daniel Passarella, le comunicó que iba a prescindir de su juego para poner a Fernando Beluschi en su lugar.
Volvió a Francia, esta vez al París Saint Germain. Luego sumó un breve paso por Estados Unidos para regresar y poner la cara en un momento delicado del club en el 2009. Las cosas andaban mal pero nunca dudó. Era último tramo del gobierno de José María Aguilar y con Néstor Gorosito de entrenador. Su nueva etapa duró sólo un año y medio porque en mayo de 2010 otra vez Passarella, esta vez como Presidente, lo sacó del club. Cruzó el charco. Se fue a quemar sus últimos cartuchos de futbolista a Nacional de Montevideo. Lugar donde colgó los botines y estrenó el sacó. Tras aquel positivo inicio de carrera volvió a River en 2014. Esta vez convocado por el ojo sabio de Enzo Francescoli.
Todo lo que pasó a partir de ahí ya lo tenemos claro. Fueron 8 años de alegrías y conquistas impactantes que se disfrutan aun hoy. En 2022 se quedo sin energías y dijo adiós. Lo que nadie pensó jamás fue que era solo un hasta luego. Porque apenas 630 dias después y tras una experiencia fallida en Arabia, Gallardo otra vez esta en el lugar que pertenece. El sitio que como mencionamos, él elige y en el que lo eligen. Nunca en estas últimas cuatro decadas Gallardo y River estuvieron separados durante un periodo de tiempo que supere los 4 años. Es toda una vida de pertenecía pura y absoluta con estos colores.
Quienes lo conocen bien saben de su espiritu competitivo y que regresa para continuar escribiendo páginas gloriosas. Pensando en seguir ganando y aumentar aún mas su legado. Supo ser el encargado de llenar las vitrinas de copas y darle un equilibrio a esas cuentas en rojo que este club tenía como deuda en el plano internacional. Y ahora quiere nas. No será fácil. Hay mucho por trabajar pero nadie mejor que él para ser el arquitecto futbolistico que diseñe las estructuras de un futuro sólido y ganador. Hay buenos futbolistas a los que mejorar y potenciar. Muchos soldados suyos de otras epocas a los que conoce muy bien. Hay jóvenes a los que seguir puliendo y refuerzos que se van sumando. Ademas recibe una buena herencia de Martín Demichelis para poder definir los mata-mata siempre en el Monumental y con 90 mil personas a favor.
Los demás están preocupados
A su juego lo llamaron. Es que la Copa Libertadores es su deseo y también el nuestro. Por eso es que todos nos entusiasmamos con su regreso. Porque River está en buenas manos para este estilo de competencia. Vuelve ese respeto y temor en los rivales coperos. Y en aquellos que no la juegan también. Se los nota preocupados a “ellos”. Están afectados por la noticia. Porque vuelve su peor pesadilla. El que les ganó dos finales y los eliminó tres veces mas de diferentes copas. El que nos devolvió ese orgullo que había sido pisoteado en el pasado por gente nefasta que habito nuestro club y nos hundió en el peor de los infiernos.
Gallardo nos permitió poder tener una carta ganadora bajo la manga y cantar retruco en cualquier debate futbolero sabiendo que nuestro festejo vale mucho más que lo que celebran ellos. La presentación fue emotiva y el Monumental colmado gritándo “Muñeeecooo Muñeeecooo” sera conmovedor. Volvió Gallardo para que todos vivamos otra vez una historia hermosisima. Gracias Marcelo, muchas gracias por volver!!