Andrade valora muchísimo cada instante como integrante del plantel profesional de River. Pese a que ya cuenta con un enorme respaldo del cuerpo técnico y los hinchas, mantiene la serenidad e incluso entiende que no debe quemar etapas.

El mundo River comienza a conocerlo, aunque él ya excedió los colores del Más Grande cuando sus lágrimas de emoción tras el debut en Primera División causaron que se hiciera conocido. Tomás Andrade siente felicidad plena. Disfruta al máximo su presente, pero de ninguna manera pretende dormirse en esos laureles iniciales. Desea crecer en Núñez. Anhela un lugar entre los 11 titulares, sin dejar de lado que en principio es importante formar parte de la lista de habituales concentrados.

Durante la mañana tan gris como ventosa y de lluvia en el predio de Ezeiza, el enganche de tan sólo 19 años conversó con La Página Millonaria acerca de sus primeros pasos como profesional. Sereno, aunque con la mirada de quien se ilusiona al imaginar un porvenir auspiciso, escuchó con atención cada pregunta. Pensó cada palabra. Es que así como lo hace dentro del campo, el volante ofensivo también entiende que se encuentra en plena etapa de aprendizaje y es indispensable recibir consejos de sus compañeros.

-Ya hiciste tu primera pretemporada con el plantel profesional, ya tuviste el debut en el semestre pasado, ¿con qué expectativas estás?
-Primero que nada, estoy muy feliz por estar acá. Creo que soy un privilegiado de ocupar el lugar que estoy ocupando. Trato de disfrutarlo cada día como disfruté al máximo la pretemporada. Hoy en día, me encuentro trabajando con el plantel, tratando de dar lo mejor para ganarme un lugar entre los 18 y luego para poder ganarme un lugar en los 11.

-¿Qué diferencias encontraste con relación a lo que es una pretemporada en Reserva?
-Si bien es River y en Reserva también teníamos muchas comodidades, estar en Primera es un nivel mucho más alto y la pretemporada en Estados Unidos fue 15 puntos. Desde el hotel hasta las instalaciones donde entrenamos y mismo la calidad del trabajo fueron excelentes. La verdad que fue la mejor pretemporada que hice desde que soy jugador.

-¿Qué aprendizaje tomaste a nivel técnico y táctico?
-Siempre trato de escuchar a los más grandes. Y más a los que jugaron en mi puesto, que tienen tantos partidos y conocen tanto como Andrés (D’Alessandro) y Piscu. Trato de aprender de ellos. Y, obviamente, el entrenador jugó en mi posición. Me gusta aprender de ellos, escucharlos, pedirles consejos. La verdad que eso me ayuda mucho. Siempre les pregunto cosas y ellos siempre están dispuestos a darme respuesta y enseñarme.

-¿Gallardo, como enganche, qué secretos te enseñó?
-Recién hace poco que lo tengo como entrenador. Todavía no hablamos bien específico de eso. Sí me pidió las cosas que quería que haga. Pero no es que me dio consejos. Me habló de entrenador a jugador. Como jugador lo he visto, era un talentoso importante.

-¿Ya caíste de que sos jugador del plantel profesional?
-Trato de tomarlo con calma. El día a día te enseña cosas nuevas. El plantel, el vestuario… Trato de tomarlo con calma y no me creo nada. Estoy en un plantel profesional, pero así como estoy acá, si el día de mañana se me suben los pajaritos a la cabeza, puedo bajar de nuevo o estar en otro lugar u otro club, entonces disfruto mucho estar acá. No me relajo y sigo con los pies sobre la tierra.

-¿Es complicado ser enganche hoy por hoy?
-Ahora estamos utilizando un sistema con dos enganches o volante ofensivos. La verdad que me gusta mucho porque podemos rotar y cambiar con el otro volante ofensivo. Es un sistema que me gusta mucho. Disfruto jugar por el medio o las bandas.

-¿Qué encontraste en el ritmo de Primera División a la hora de encarar? ¿Es más intenso que en Reserva?
-Sí, es más intenso. Obviamente creo que también lo hace más difícil el contexto. Las tribunas, el folklore. Todo eso te agrega una presión doble, que yo la verdad que no la sentí en los partidos que jugué. Pero si sacamos las tribunas, no sé si hay tanta diferencia con la Reserva.

-¿Cuál es tu objetivo principal para este semestre?
-Poder afianzarme, ser citado siempre a los partidos, estar entre los 18 y, una vez que ya logre esa continuidad, pelear por un lugar para estar entre los 11. Ésa es un objetivo a corto y mediano plazo.

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