La carrera de Maximiliano López ya se transformó en una especie de trotamundos de elite porque vistió muchas camiseta de diferentes países, pero siempre en ligas importantes. Surgido de las Divisiones Inferiores de River, pasó por el Barcelona, Mallorca, Moscú FC, Gremio, Catania, Milan, Sampdoria, Chievo Verona, Torino, Udinese y Vasco da Gama hasta arribar al Crotone, su equipo actual.
Identificado con River, pese a que su partida a España fue hace 15 años, el experimentado delantero recordó a través de sus historias de Instagram un Superclásico donde fue la gran figura. Ocurrió el 16 de mayo de 2004, cuando el gol de Fernando Cavenaghi permitió que el Millonario venciera a Boca en su cancha luego de dos temporadas.
Cuando apenas iban siete minutos del primer tiempo, José Marcelo Salas salió lesionado. López fue elegido por el técnico Leonardo Astrada para reemplazar al chileno. El atacante formado en Núñez resultó determinante porque enloqueció a la defensa de Boca, sobre todo a Rolando Schiavi. Tan relevante fue su nivel que inició el ataque que causó el tiro de esquina ejecutado por Marcelo Gallardo para que Claudio Husain peinara la pelota y Cavenaghi señalara el 1-0 definitivo.