La década del 90 para River estuvo marcada por el éxito, lo mejor del Más Grande de esa época es sin dudas lo que sucedió entre 1996 y 1997, cuando el gran Ramón Díaz llevaba las riendas del equipo, un grupo plagado de estrellas que supieron convivir y consiguieron ganar la Copa Libertadores del 96, el Tricampeonato (Apertura 96 y 97 y Clausura 97) y la Supercopa Sudamericana de 1997 ante San Pablo. Por nombrar algunos de los jugadores que vistieron el Manto Sagrado por ese entonces hay que resaltar las figuras de Enzo Francescoli, Ariel Ortega, Hernán Crespo, Marcelo Gallardo, Matías Almeyda, Germán Burgos, Hernán Díaz, Marcelo Salas y también las de dos futbolistas exquisitos que hicieron desastres por la banda izquierda como Juan Pablo Sorín y Sergio Berti.

Daba placer ver jugar al River de Ramón, fue uno de los mejores equipos de la historia de River –que tiene pergaminos como ningún equipo en el fútbol argentino- y más allá de haberlo materializado en títulos –que sin dudas es sumamente importante- ese equipo quedó en la historia por lo bien que jugaba, por lo inteligente que era y también por la figura de Enzo Francescoli que encontró su mejor versión al final de su carrera. Pero el uruguayo no podría haber conseguido nada sin jugadores como Juan Pablo Sorín y Sergio Berti, ambos se entendieron como pocos en la banda izquierda, Juampi escalando desde atrás y la Bruja y como un volante ofensivo y una clase exquisita.

El cruce en las redes

Sergio Berti compartió en su cuenta de Instagram una imagen suya subida al alambrado celebrando un gol y en la misma se mostraba feliz por el regreso del público a los estadios –en River será nada más y nada menos que ante Boca el próximo domingo- y comentó: “Feliz vuelta a lo más lindo… los hinchas!”. Juan Pablo Sorín le respondió con un elogio contundente: “Que jugador, que zurda! Sergio Ángel y qué golazo ese. Abrazo fuerte socio”. La Bruja no fue menos y cerró la conversación: “que banda esa por izquierda socio, como olvidar esos momentos. Abrazo grande”. Juntos ganaron el Tricampeonato y la Supercopa del 97.