En un partido muy completo, Facundo Colidio fue uno de los jugadores más destacados de River durante el triunfo en el Superclásico ante Boca y, así como él y su familia celebraron esto, Marcos Rojo lo sufrió durante toda la tarde al punto de cometer un acto totalmente desleal.
En una de las tantas situaciones en las que tuvo que ser amonestado, el defensor y capitán de Boca no toleró el baile que le estaba dando Colidio y lo escupió por las espalda en la previa a un lateral. Un gesto totalmente repudiable que Nicolás Ramírez y el VAR ignoraron.
Si bien para algunos pueda parecer algo menor, el escupitajo es considerado una agresión y Marcos Rojo debía ser sancionado por esta actitud antideportiva. Sin embargo, Ramírez no lo amonestó como tampoco lo hizo en el codazo que dio en la primera parte.
Pese a que empujó a varios jugadores de River y protestó de manera desmedida en más de una ocasión, insólitamente Ramírez apenas le cobró dos faltas a Marcos Rojo y el defensor tuvo una vez más carta blanca para hacer de las suyas en un partido con varios errores para el árbitro.
La insólita postura de Boca ante la derrota con River
Tanto Marcos Rojo como Sergio Romero y Diego Martínez tomaron una postura un tanto curiosa tras la victoria del Millonario en la Bombonera afirmando que Boca merecía no solo empatar, sino ganar el partido. Sin embargo, con apenas dos llegadas de peligro, la realidad marcó otra cosa.