La decisión de Marcelo Gallardo de declarar transferibles tanto a Paulo Díaz como a Sebastián Boselli, más el hecho de saber que Germán Pezzella todavía tiene para algunos meses más en la recuperación de ligamentos cruzados fueron factores que podían hacer sospechar que River vaya en la búsqueda de un marcador central en este mercado de pases, pese a que Juan Carlos Portillo puede desempeñarse allí y que el Muñeco sumó a la pretemporada a la dupla de la reserva, Ulises Giménez y Facundo González.

En medio de todo este contexto el nombre donde el Más Grande apuntó todos sus cañones fue el de Jhohan Romaña, el colombiano de San Lorenzo que ha sido un pilar del equipo azulgrana y que además ha tenido un 2025 de mucha participación activa, habiendo disputado 36 de los 39 encuentros oficiales del año.

¿Cuáles son los motivos por los que River puso la mira en Romaña? Principalmente en su personalidad y voz de mando, algo que le viene faltando al equipo desde el liderazgo de la zaga central. Además el defensor de 27 años se ha mostrado muy firme en los duelos mano a mano debido a su gran solvencia física, y es muy duro en el enfrentamiento tanto en el cuerpo a cuerpo como en las pelotas divididas aéreas, donde tiene muchísimos despejes por partido sobre todo en envíos frontales.

Y apuntando al factor polifuncionalidad, el colombiano podría adaptarse por cualidades correctamente también a una línea de tres centrales como zaguero por derecha, en un dibujo táctico al que Gallardo suele apostar en algunos partidos puntuales, si bien en San Lorenzo se ha desempeñado casi siempre con línea de cuatro y en un sistema donde no se asumían demasiados riesgos defensivos.

Y el último de los factores a tener en cuenta para analizar pasa por algunas facilidades económicas que se pueden aprovechar. Sabiendo la sensible situación financiera que atraviesa San Lorenzo y que la apuesta de River en este receso está sostenida por un tope de dinero, hay una buena oportunidad de mercado abierta y buenas intenciones para negociar y llegar a un acuerdo para que el colombiano pueda salir en un costo un poco más accesible por un porcentaje alto del pase, si bien hasta el momento las negociaciones se encuentran más estancadas que activas. El correr de los días jugará a favor de River y en contra de las urgencias de San Lorenzo.

¿En qué aspectos le podría costar un poco más a Romaña una adaptación a River?

Entre los puntos débiles, el hecho de apostar a Romaña conlleva a saber que en ningún momento de su carrera estuvo adaptado a la idea de pararse defendiendo prácticamente en campo contrario y con una estancia por cubrir en sus espaldas, sumado a que si bien no es un jugador lento ni mucho menos tampoco la velocidad final es uno de sus grandes fuertes. Una cosa es recibir a los rivales de frente y manejando los tiempos de la marca, y otra muy distinta es estar perfilado los 90 minutos para correr en cualquier momento hacia atrás contra delanteros más ágiles en el mano a mano.

Sumado a esto tampoco lo destaca demasiado la salida clara en corto o en largo para iniciar jugadas o sorprender con cambios de frente, pese a que en la última temporada ha corregido el control y no tiene problemas en arriesgar, un factor que a veces le jugó en contra cuando esa la confianza la ha utilizado en exceso y sin sentido común.