El Millonario saltó al campo de juego con una formación con muchos cambios, teniendo en cuenta la última presentación en Santa Fe frente a Colón. Dos de ellos eran lógicos, porque Franco Armani y Paulo Díaz regresaban de participar de la fecha FIFA. Pero hubo una decisión de Demichelis que sorprendió desde el vamos: el ingreso de Santiago Simón por Andrés Herrera. Con la idea de imponer condiciones desde el arranque, el DT le renovó la confianza al mediocampista, que volvió a jugar en una posición en la que aporta salida permanente y llegada al fondo.
La premisa del Millonario salió a bien, por momentos. Porque River se hizo dueño rápidamente de la pelota y del partido, más allá de la presión que intentó el equipo de Carlos Tévez con los mediocampistas y los laterales bien arriba. Sin embargo, al elenco de Martín Demichelis le faltó profundidad y claridad en los últimos metros durante los primeros veinte minutos, en los que pasó poco y nada dentro de la zona de fuego.
Para encontrar la primera situación clara de gol hubo que esperar hasta el minuto 25, cuando Esequiel Barco hizo gala de su buena pegada y sacó un zurdazo violento contra el primer palo que se desvió levemente en el camino y alcanzó a manotear Rodrigo Rey al córner. River tuvo algunas llegadas profundas por los laterales, pero casi siempre terminó en centros pasados contra el segundo palo y remates interceptados por algún jugador del Rojo. Faltaba la puntada final.
A partir de los 30 minutos, el clásico se hizo mucho más entretenido, con situaciones en los dos arcos. El equipo de Tévez tuvo una chance clarísima a los 32′ de juego, a través de un centro de Iván Marcone y un cabezazo exigido de Matías Giménez que casi se cuelga en un ángulo. El Millonario respondió con un remate de Miguel Borja desde afuera del área que dio en el poste derecho de Rodrigo Rey. El Colibrí estaba olfateando el gol.
La primera emoción de la noche llegó a los 36 minutos, luego de una buena apertura de Esequiel Barco para Paulo Díaz y un disparo del chileno desde afuera del área que dejó temblando el arco: palo, rebote y el olfato de Miguel Borja para empujar debajo del arco. River era más y merecía el 1-0 a esa altura d el partido. El Colibrí abrió la cuenta y festejó como lo viene haciendo: apuntando al cielo y agradeciendo a Dios.
Sobre el cierre de la primera etapa, Federico Mancuello tuvo un tiro libre en la puerta del área y estuvo muy cerca de convertir la igualdad. La pelota salió apenas desviada, ante la atenta mirada de Franco Armani. River también tuvo el segundo grito en la palma de la mano a través de un cabezazo tremendo de Miguel Borja que se metió contra el palo de Rey, pero estaba claramente adelantado. El lineman anuló la maniobra.
En el inicio del complemento, el Rojo pareció asumir un poco más el protagonismo. Al menos, adelantó sus líneas y trató de amigarse con el control de la pelota. Y generó la primera clara de la segunda mitad luego de un córner, un despeje que quedó corto y un remate de Federico Mancuello desde afuera del área, con una volea que fue a parar a las manos de Franco Armani.
Más allá de unos primeros minutos favorables al Rojo, el Millonario recuperó rápidamente el dominio del partido y empezó a generar situaciones claras sobre el arco de Rodrigo Rey. A los 12 minutos, tras una jugada fantástica de Enzo Pérez a pura gambeta y de una falta de Felipe Aguilar contra el capitán de River, Manu Lanzini ejecutó un tiro libre que se fue apenas por encima del travesaño.
Dos minutos más tarde, el Más Grande construyó la jugada del segundo gol, a través de un centro milimétrico de Santiago Simón y de una excelente definición de Miguel Borja ante la salida de Rodrigo Rey. El VAR chequeó la posición del Colibrí, que estaba en la misma línea y convalidó el doblete del colombiano, que tuvo una noche inspirada en el Monumental.
El Rojo estuvo a tiro del descuento a través de un remate de Matías Gimánez que dió en el ángulo y esa fue la última jugada clara del equipo de Carlos Tévez, porque después fue todo de River. El Millonario se floreó y cuando se lo propuso, lastimó a Independiente, que se le quemaron todos los papeles. Facundo Colidio tuvo dos chances clárisimas que Rodrigo Rey alcanzó a tapar con los pies. Hasta Rondón tuvo la suya. Los cambios entraron muy bien para jugar los minutos finales.
A los 36 minutos, luego de un enganche y de hacer pasar de largo al central del Rojo, Pablo Solari sacó un remate contra el palo izquierdo de Rey y estableció el 3 a 0 frente al Rojo. Un grito que se ajustó a la perfección a lo que fue el segundo tiempo, en el que River fue claro dominador y en el que aprovechó la desesperación de Independiente en busca del descuento. En definitiva el Más Grande ganó bien, goleó, bajó al equipo de Carlos Tévez de la punta y se trepó otra vez a lo más alto de la Zona A.
FORMACIONES:
RIVER PLATE (4-2-3-1): 1-Franco Armani; 31-Santiago Simón, 14-Leandro González Pirez, 17-Paulo Díaz, 20-Milton Casco; 24-Enzo Pérez, 29-Rodrigo Aliendro; 26-Ignacio Fernández, 10-Manuel Lanzini, 21-Esequiel Barco; 9-Miguel Borja. DT: Martín Demichelis.
Suplentes: 33-Ezequiel Centurión, 15-Andrés Herrera, 13-Enzo Díaz, 6-David Martínez, 3-Ramiro Funes Mori, 22-Matías Kranevitter, 8-Agustín Palavecino, 29-Rodrigo Aliendro, 36-Pablo Solari, 18-Gonzalo Martínez, 16-Facundo Colidio, 25-Salomón Rondón y 7-Matías Suárez.
INDEPENDIENTE (4-3-3): 33-Rodrigo Rey; 22-Mauricio Isla, 13-Cristian Báez, 2-Joaquín Laso, 15-Damián Pérez; 17-Lucas González, 23-Iván Marcone, 11-Federico Mancuello; 32-Alexis Canelo, 34-Matías Giménez y 29-Braian Martínez. DT: Carlos Tévez.
Suplentes: 1-Renzo Bachia, 26-Felipe Aguilar, 21-Julio Buffarini, 3-Edgar Elizalde, 4-Patricio Ostachuk, 8-Kevin López, 14-Martín Sarrafiore, 10-Santiago Toloza, 41-Javier Ruiz, 28-Sergio Ortíz, 30-Baltasar Barcia y 37-Rubén Martínez.
DATOS DEL PARTIDO:
Hora: 21.00
Estadio: Monumental
Árbitro: Facundo Tello
Asistentes: Ezequiel Brailovsky y Miguel Savorani
VAR: Héctor Paletta
AVAR: Sebastián Zunino
TV: TNT Sports