Por los octavos de final de ida de la Copa Libertadores 2019, River debió disputar su primer encuentro oficial del segundo semestre en el estadio Monumental.

Entre las principales novedades, el equipo comandado por Marcelo Gallardo no pudo contar con Rafael Borré, que debió cumplir una fecha de suspensión. A su vez, Leonardo Ponzio y Lucas Pratto integraron el banco de suplentes, ya que no se encontraban al 100%.

Durante los primeros minutos del encuentro, La Banda realizó una buena tarea con la pelota. Se adueñó del juego y logró lastimar a Cruzeiro apostando por el buen trabajo de los laterales -sobre todo el de Gonzalo Montiel-, quienes metieron varios centros que hicieron tambalear a la defensa del rival.

Pese a que las elaboraciones en el mediocampo fueron buenas, el Millonario no encontró los caminos para poder finalizar bien las jugadas. De hecho, careció de puntería a la hora de resolver en los metros finales.

¿Los dirigidos por Mano Menezes? Casi no pudieron lastimar al elenco del Muñeco, que durante casi toda la primera parte intentó jugar con la línea defensiva lo más lejos posible del arco de Franco Armani. 

A 11 minutos del final del primer acto, River recibió una mala noticia: Javier Pinola debió pedir el cambio por una dolencia en la parte posterior de la pierna derecha, por lo que Robert Rojas terminó ingresando en su lugar.

En la segunda mitad, El Más Grande comenzó a perder la posesión y al mismo tiempo dejó de tener peso en ofensiva. Las imprecisiones dijeron presente y esto elevó la confianza de Cruzeiro que, hasta el momento, se había mostrado cauto para atacar.

Los brasileños se animaron a jugar y, por momentos lograron hacer retroceder a la defensa del Millo. De hecho, Marquinhos Gabriel terminó convirtiendo en un mano a mano ante Franco Armani. De todos modos, Julio Bascuñán recibió indicaciones por parte de los asistentes del VAR, quienes consideraron que hubo posición adelantada del atacante brasileño.

River se acordó de jugar durante los últimos 15 minutos de la segunda parte y, con el empuje de Lucas Pratto -entró en lugar de Julián Álvarez- el ataque del elenco de Gallardo mejoró, aunque no lo necesario.

Sobre el final, Bascuñán detuvo el partido dos veces más debido al VAR: la primera fue por un pisotón de Dedé ante Gonzalo Montiel en el área de Cruzeiro; y la segunda fue por una mano de un defensor brasileño. ¿El resultado? El juez chileno optó por no repasar las jugadas con el sistema videoarbitral.

A falta de un minuto para que terminara el partido, un hombre de Cruzeiro agarró de la camiseta a Pratto y Bascuñán chequeó la acción con el VAR. El árbitro cobró penal y Matías Suárez se hizo cargo del remate. Aun así, y lamentablemente, el delantero envió la pelota por arriba del travesaño.

Sí, La Banda terminó igualando 0-0 con el equipo de Menezes en el Monumental. Comenzó bien el partido, pero se desmoronó en la segunda parte y lo pagó caro. El próximo martes 30 de julio, a las 19.15 horas, deberá ir a Belo Horizonte (Brasil) a ganar la serie. Pero para ello, sin dudas, tendrá que mejorar varios aspectos. ¡Vamos todos unidos!

 

+ El relato del partido: