El encuentro ya tenía 30 minutos del primer tiempo cuando River se puso arriba en el marcador mediante una pelota parada. Tras un gran centro de Nacho Fernández desde la izquierda, Javier Pinola apareció por detrás de todos para cambiar la trayectoria del balón gracias a un cabezazo furibundo.

De esta forma, la valla del arquero de Palestino fue vulnerada y el equipo de Gallardo comenzó a hacer realidad el objetivo de ganar en tierras trasandinas para lograr la clasificación a octavos de final.

Luego de este tanto, y ya en la segunda mitad, Ignacio Fernández volvió a ser protagonista. Esta vez, ganó una pelota que parecía perdida ante el arquero González y convirtió el segundo tanto a favor del Más Grande.