Almeyda aseguró que el Superclásico del domingo era un duelo especial para que él esté adentro de la cancha. Y agregó: “Si estaba pedía que llueva más”.
Su último partido con Boca será recordado siempre por el hincha de River. En el Superclásico del Clausura 2011 jugado en el estadio Alberto J. Armando, La Banda fue absolutamente perjudicada por el árbitro Patricio Lousteau, en uno de los peores momentos de la historia de la institución de Núñez.
En ese encuentro, el Pelado vio la tarjeta roja y explotó de impotencia, por lo que se despidió del chiquero entre protestas, agarrones con Carlos Maglio (cuarto árbitro) y besándose el manto sagrado con los hinchas del Más Grande detrás y los simpatizantes de Boca enfrente, mientras era acompañado por la policía.
Recordando aquel partido, el exvolante fue consultado por el River-Boca del último domingo y aseguró: “Me ponía el cuchillo, el tenedor y la servilleta. Pedía que llueva más. Era un partido para mis características, más un clásico”.
Finalmente, en diálogo con “Radio Güemes”, el entrenador de Banfield concluyó: “Estuvo muy parejo. Los jugadores y entrenadores tenemos que estar aptos para cualquier tipo de terreno. Estamos preparados para jugar con agua, para que nos cambien el horario. A nivel espectáculo no es lo mismo, pero para los jugadores sí”.



