Todo lo que haga o deje de hacer Enzo Pérez tendrá repercusión en River. Se lo ganó por su figura de capitán, dentro y fuera de la cancha. Porque es el primero en dar la cara en las buenas y las malas, porque es quien dirige la batuta dentro de la cancha y porque es el encargado de encarrilar, aconsejar y acompañar a los jóvenes que se suman al plantel, entre tantas otras tareas que debe hacer un líder de su talla y experiencia.

La posibilidad de que no renueve su contrato que vence a fin de año sacudió al Mundo River y es real, la chance existe, pero aún no hay nada confirmado como se dice. Para entender cómo se llegó hasta este punto, hay que retroceder un poco en el tiempo y contar cómo está la negociación.

Desde el mes de abril que River y Enzo Pérez tienen un principio de acuerdo para la renovación de su vínculo por una temporada más, hasta el 31 de diciembre de 2024, en lo que sería la tercera extensión de su contrato desde que llegó a Nuñez en 2017. Estaba todo listo para anunciarlo, solo faltaba estampar la firma.

En ese interín, fue Enzo Pérez quien levantó el teléfono y le pidió a los dirigentes postergar la renovación y que le dieran un tiempo más para pensarlo. Enzo dijo varias veces que su deseo es retirarse en Deportivo Maipú, pero esta acción de “patear” la firma no tiene que ver con eso, sino con un sentimiento suyo, con un desgaste mental que le implica el día a día de River y en menor medida un cansancio futbolístico.

Uno de los puntos de desgaste para el mendocino, más allá de lo deportivo (que tiene que ver con la edad y con la competencia interna), tiene que ver también con el rol que heredó tras el retiro de Ponzio en tener que ser la voz del plantel en las reuniones con los directivos. Llevar la cinta en la cancha implica también asumir ese rol afuera y muchas veces esas charlas donde se negocian los premios, entre otras cosas que se hacen en representación del plantel, también son motivo de cierto agotamiento.

Enzo Pérez no le comunicó ninguna decisión a los dirigentes de River y lo va a hacer recién a fin de año. Es posible que dentro del Millonario se empiece a palpar o a sentir que estos seis meses serán los últimos con el Manto Sagrado, pero aún el capitán no tomó la determinación final. ¿Habrá Enzo para un rato más?