Si Lucas Beltrán todavía formara parte del plantel de River no habría duda alguna que el próximo domingo saldría desde el arranque ante Boca. Pero a comienzos de 2021, el Vikingo apenas sumaba un puñado de partidos en Primera y cuando Marcelo Gallardo lo confirmó como titular en el superclásico correspondiente a la Copa Diego Maradona en la Bombonera generó revuelo.

En 2020 el mundo se paralizó por la pandemia del Coronavirus y el fútbol no fue la excepción. En Argentina se buscó la alternativa para jugar un campeonato entre noviembre y enero en el cual los 24 equipos de Primera División se dividían en seis zonas de cuatro equipos y los dos primeros avanzaban a la Zona Campeonato y los dos restantes iban a la Zona Complementación. De los doce equipos que pasaban a la Zona Campeonato se dividían en dos de seis y los ganadores de esas zonas jugaban la final. River integró la zona con Boca y por eso el 2 de enero de 2021 se enfrentaron en la Bombonera.

El contexto

River había tenido muy buenos partidos en lo que fue el regreso al fútbol tras el parate por la pandemia. En la Libertadores se hizo fuerte en su grupo y en la Copa Diego Maradona había superado su grupo sin problemas. En lo que respectaba a los delanteros estaban Rafael Santos Borré -como una fija- y también un Julián Álvarez que se estaba afianzando, Federico Girotti como alternativa, Matías Suárez regresando de una lesión, Lucas Beltrán como un proyecto a futuro y Lucas Pratto para pelear por la titularidad.

El Oso se fue de un día para otro a Feyenoord y llegó el turno de enfrentar a Boca, Gallardo no tenía a disposición a Julián Álvarez y restaba saber quién sería el compañero de Borré en la ofensiva. Todo indicaba que sería Matías Suárez o en su defecto Federico Girotti, que había mostrado cosas interesantes en sus primeros partidos en Primera. Pero el Muñeco sorprendió a todos con la inclusión desde el arranque de Lucas Beltrán en la delantera, lo que desconcertó a propios y extraños.

¿Cómo fue el superclásico?

El encuentro en la Bombonera comenzó favorable para el local que en la primera mitad se puso en ventaja con gol de Ramón Ábila y así se fueron los equipos al descanso. Para el inicio del segundo tiempo, el Muñeco movió el banco y puso a Suárez por Beltrán, más tarde entró Girotti y en un abrir y cerrar de ojos, el Más Grande lo dio vuelta con goles de Girotti y Borré. A falta de cuatro minutos para el cierre lo igualó Villa en una contra. El partido terminó 2 a 2.