Noche completamente negra para River en el Estadio Maracaná. Después de un primer tiempo a la altura, el equipo fue vapuleado en el complemento en un combo letal que incluyó pésimas decisiones arbitrales, deficiencias propias y un Fluminense que no soltó nunca el pie del acelerador. El resultado fue un categórico 5-1 que podría complicar la clasificación.

Lo que muchos hinchas de River le están recriminando a Demichelis desde que terminó el partido son los cambios que decidió hacer en pleno segundo tiempo, con el Millonario perdiendo solo 2-1: salieron De la Cruz y Mammana (central) e ingresaron Pablo Solari y José Paradela. El DT dejó una línea de tres en el fondo con Casco y Herrera, ambos de muy flojo partido, y González Pirez, que estaba amonestado y caminaba por la cornisa ante cada ataque rival.

Hice los cambios para presionar con seis hombres, a Mammana lo esperamos hasta la entrada en calor para ver si podía jugar. En esa línea de tres teníamos a Pablo Solari y a Paradela por afuera, queríamos terminar con línea de cinco. Cuando los metimos a ellos era para igualar el partido desde el resultado“, explicó Micho en conferencia de prensa.

Con la desventaja y uno menos se empiezan a ver los espacios. Los jugadores quieren luchar hasta el final y dejamos muchos espacios en eso de saltar a la presión, pero nos vamos a levantar desde lo anímico para llegar muy bien al domingo“, agregó Demichelis, reconociendo que se equivocó.

Por último, indicó que la idea era hacer las modificaciones antes de que iniciara el segundo tiempo pero que cambió a último momento de parecer: “Los cambios de Paradela y Solari los íbamos a hacer en el entretiempo, nos quedaba la línea de cuatro contra dos. En vez de perder dos quería perder uno y presionar con seis. No era plata o mierda. A veces sale y otras no sale. Estando 2 a 1 encontrábamos esos pases para adelante“.