(Mar del Plata – Enviado especial) Los hinchas del Más Grande deliraron con la victoria en el Superclásico. No sólo alentaron durante toda la noche, sino que también pusieron un gran colorido y entonaron 39 canciones.
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Es la mejor hinchada del mundo. River tiene a la parcialidad más destacada, la más fiel. Nuevamente quedó demostrado en el estadio José María Minella, donde alrededor de 20.000 almas respaldaron al equipo que dirige Marcelo Gallardo. Fue una fiesta con todas las letras, nada menos que 39 melodías diferentes tanto para apoyar al manto sagrado como gastar al eterno rival e incluso ovacionar al Muñeco y Leonardo Ponzio.
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Para alentar al conjunto de Núñez se hizo sentir desde un principio “River, mi buen amigo”, acompañado por un recibimiento con bengalas mientras los fuegos artificiales de la organización le ponían un clima espectacular a la noche. “Al fin va a decir la verdad la verdad el que escribe los diarios”, “yo paro en una banda, la más loca de Argentina”, “descontrolado yo vengo igual, de visitante y de local” y “por eso yo vengo a alentar, River salí campeón”, entre otras, fueron algunas canciones elegidas.
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Además, antes de conseguir de la apertura del marcador y luego de marcar ambos goles, las gastadas a Boca estuvieron siempre. Desde “el que no salta, abandonó”, “no se escucha, no se escucha, sos amargo, bostero…”, reiterado en varias ocasiones, el recuerdo por la salida inesperada del ídolo ajeno (“los cagó, y Tevez los cagó”, así como “ponelo a Tevez, la pu… que te parió”) y la propuesta barrial: “Si querés dar la vuelta, no te quedes con ganas, hay una calesita en el Parque Lezama”. Aunque la más grande del mundo estaba a pocas cuadras del Mundialista, sobre la avenida Juan B. Justo.
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¿Más? La tradicional invitación a realizar turismo o directamente residir en tierras límitrofes, “Boca no tiene marido, Boca no tiene mujer”, “sólo le pido a Dios, que se mueran todos los bosteros” y el anuncio hacia la tribuna de enfrente, teniendo en cuenta que el triunfo era inminente: “Se viene el abandonooo, se viene el abandonooo”. Luego, ese mismo ritmo, se transformó en “se viene el Panaderooo”. También, con una gran sincronización, se usó “un minuto de silencio (larga pausa) para Boca que está muerto”. Fue una fiesta de River. Una fiesta en Mar del Plata. La Feliz es de River.
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+ EDITORIAL: River ganó con chapa copera
+ JUGADOR X JUGADOR: el puntaje de cada jugador de River en el clásico
+ RIVER 2 – 0 BOCA: los goles del triunfo
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+ MORA: “Cada vez que Gallardo me ponga, voy a dejar todo”.
+ MINA: “La victoria es importante para lo que queremos”
+ MAIDANA: “Volvimos a levantar el nivel ante un clásico rival”
+ OLIVERA: el lateral salió por un golpe