En medio del pedido de postergación del reinicio de la Copa Libertadores, los clubes argentinos empezaron a evaluar la chance de cambiar la localía para poder jugar el torneo, en caso de que Conmebol siga con su idea de realizarlo. El Millonario, con vistas a reanudar los entrenamientos el 10 de agosto en grupos reducidos, espera respuestas de la AFA para ver que accionar tomar: Uruguay asoma como una posibilidad para practicar con más libertades.

Por otro lado, el gobierno uruguayo no flexibizará las medidas sanitarias establecidas para los ciudadanos extranjeros que quieran ingresar al país, lo que obligará a cumplir una cuarentena de siete días a todos los clubes de fútbol que tengan que competir en Uruguay en el marco de las contiendas internacionales. Así lo reflejó Pablo Ferrari, subsecretario de la Secretaría Nacional del Deporte.

"Entiendo a Conmebol, pero no todos los países están en igualdad. Si los clubes argentinos quieren venir a jugar acá, que manden la propuesta. Con protocolos y cuidados necesarios no habría problema", expresó Pablo Ferrari, en charla con Radio Rivadavia. "El club argentino que quiera venir a jugar de local en Uruguay, tendrá que pedir un permiso y será evaluado. Club o delegación que ingrese a Uruguay, tendrá que hacer siete días de cuarentena sí o sí", agregó.

Como ejemplo, Ferrari explicó que ni siquiera los planteles de Nacional y Peñarol, tras un posible retorno al país después de haber jugado partidos en el exterior, evitarían el doble hisopado y la cuarentena de siete días. Ya hay dos equipos que comenzaron a tantear el terreno: Boca y Defensa y Justicia. Ambos se contactaron con Solanas para planear en caso de que en Argentina no haya avances con los entrenamientos. ¿River se subirá al buquebus?