River tiene una meta clara: ganarle a Boca el próximo domingo en la Bombonera para acercarse a los líderes de la Liga Profesional y también para tener ese envión anímico fundamental para afrontar la recta final del campeonato. Marcelo Gallardo pondrá lo mejor que tenga a disposición, sabe que ante Boca es un partido fundamental, aunque no determinante y es por eso que no arriesgará a ningún jugador.
Franco Armani encendió las alarmas en el mundo River el pasado 31 de agosto cuando no salió a jugar el segundo tiempo ante Defensa y Justicia por los octavos de final de la Copa Argentina, en su lugar ingresó Ezequiel Centurión que lo hizo muy bien tanto ante el Halcón como el pasado domingo contra Barracas Central por la Liga Profesional. Los estudios determinaron que Armani sufrió un pequeño desgarro en el aductor.
El otro de los tocados es Pablo César Solari. El Pibe jugó desde el arranque ante Barracas Central pero a los 15 minutos del segundo tiempo se retiró con una molestia en su aductor izquierdo, los estudios determinaron que tiene un pequeño desgarro. Este martes tanto el ex Colo Colo como Armani se entrenaron en el gimnasio y trotaron en una de las canchas del River Camp. Su evolución será día a día para ver si llegan contra Boca.
¿Estarán en la Bombonera?
El Muñeco y el cuerpo médico esperarán a Armani y a Solari hasta último momento. Todo indica –habrá que ver cómo sigue la evolución- que el arquero podría estar desde el arranque ante Boca pero que el Pibe se perdería el superclásico. Las variantes para reemplazarlo, en caso que no llegue, son muchas. El Muñeco se podría decantar por Matías Suárez, Esequiel Barco o Santiago Simón.