Las prioridades actuales en la agenda de la dirigencia de River son dos: cerrar y oficializar la renovación de contrato de Nicolás De la Cruz y definir al nuevo entrenador. Lo primero ocurrirá la semana próxima de no existir ningún inconveniente mientras que lo segundo quizás tome algunos días más, aunque la intención es que dentro de las próximas dos semanas pueda anunciarse al sucesor de Marcelo Gallardo.
Quien reemplace al Muñeco deberá ir pensando en los 10 jugadores que tienen que volver al Más Grande después de haber estado cedidos durante todo el año en otros clubes. Uno de ellos (y quizás el de mayor renombre o expectativa) es Alex Vigo, quien culmina su contrato con Independiente el 31 de diciembre y es casi un hecho que no se quedará en el equipo de Avellaneda.
El lateral derecho fue titular a lo largo de los dos torneos locales, tanto con Eduardo Domínguez como con Julio Falcioni, pero lejos estuvo de tener un nivel destacado y fue uno de los jugadores más señalados por los hinchas dentro del mal momento futbolístico del equipo. El Rojo tiene una opción de compra de U$S 2.500.000 por un 50% del pase que no se va a ejecutar y así Vigo volverá a Nuñez.
Con contrato hasta diciembre de 2024 y el detalle de que River compró un 25% más de su pase a Colón en la operación de Rodrigo Aliendro (quedó un 75% en manos del Millonario y el resto en posesión del Sabalero), el futuro de Vigo es una incógnita y será el próximo entrenador el encargado de decidirlo. A priori, aparece como el único jugador con chances de quedarse, pero dependerá pura y exclusivamente del nuevo DT y del pensamiento de la dirigencia, que quizás quiera recuperar algo del dinero que se invirtió por él.
