Juan Fernando Quintero vivió el último domingo en el Monumental una noche repleta de sensaciones encontradas. La despedida de Marcelo Gallardo, a quien considera un padre futbolístico, es un factor determinante para poder explicar su reacción sobre el final del encuentro ante Rosario Central. El crack colombiano perdió los estribos y se vio envuelto en un forcejeo con el juez que derivó en una expulsión directa que pudo costar demasiado cara.

Si bien la letra fría del reglamento de Transgresiones y Penas establece sanciones de hasta cinco años para los futbolistas que empujan o agreden a un juez del partido, finalmente el informe de Fernando Echenique encuadró el accionar de Juanfer dentro de “protestas y términos descomedidos”.De esta manera, el 10 millonario zafó de un castigo más severo y recibió tres fechas de suspensión. La primera de ellas la cumplirá este domingo en el clásico ante Racing, mientras que las dos restantes deberá hacerlo en los primeros partidos oficiales del próximo torneo, siempre y cuando renueve su contrato con el club de Núñez.

¿Qué dice el reglamento?

A Juan Fernando Quintero le aplicaron el artículo 186 del reglamento de Transgresiones y Penas, que establece una suspensión de uno a cuatro partidos al jugador que proteste los fallos del árbitro o se dirijan en términos descomedidos o ademán airado hacia la persona del árbitro y sean de menor gravedad que los previstos en el artículo 185°.