Robert Rojas es una de las piezas más importantes de River en lo que va del semestre, supliendo bajas importantes en la defensa y destacándose como lateral derecho en partidos importantes, además de haber marcado dos goles claves ante Talleres y Estudiantes. Su rendimiento no genera conflicto alguno para los hinchas, lógico, pero una cláusula de compra en su contrato si terminó en problemas en los escritorios entre River y Guaraní de Paraguay, dueño de un 55% de su ficha.
El Millonario adquirió al Sicario en enero de 2019 por la suma de 1.400.000 dólares por un 45% de su pase y en el contrato se estipuló una cláusula obligatoria de compra: si el defensor disputaba el 60% de los partidos oficiales de River en 2019 o 2020, el Más Grande debía comprar el segundo 45% del pase en el mismo monto que desembolsó al momento de la transferencia original. El Sicario cumplió con el objetivo en el año 2020 y por eso, por contrato, debía pagar 1.400.000 más y acá nació el conflicto.
Desde River le comunicaron formalmente a Guaraní la decisión de comprar el otro 45% pero según parece no hubo pago alguno y por eso hace algunos meses arrancaron a negociar. La dirigencia ofreció pagar dicho número en varias cuotas pero el equipo paraguayo no quería saber nada con ver el dinero de a poco, sino que quería todo en un solo pago. No se pusieron de acuerdo y el conjunto aurinegro elevó un reclamo a FIFA instando a River pague los 1.400.000. Desde Zurich se pusieron del lado de Guaraní y por eso en River decidieron recurrir al Tribunal de Arbitraje Deportivo, última instancia posible para reclamar.
¿Cómo termina la historia?
El TAS suele expedirse después algunos meses en los distintos casos que va recibiendo y por eso todo indica que este tire y afloje entre Guaraní y RIver no se va a resolver hasta por lo menos que termine el año. Si el TAS le da la derecha a los paraguayos, el Millonario deberá pagar los 1.400.000 de inmediato. Veremos cómo termina esta contraposición...
