(Incluye video) Gallardo dispuso un ensayo entre los suplentes y la Reserva. Varios jugadores fueron observados tanto por el técnico como sus colaboradores.
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Alrededor de 35 metros de largo por unos 25 de ancho fue el terreno de juego limitado con cintas en la cancha número 1 del predio de Ezeiza para que hubiera una práctica en espacios reducidos. Durante media hora neta, teniendo en cuenta que hubo interrupciones para tomar agua y repasar conceptos, los jugadores realizaron diversos movimientos bajo la atenta mirada de Marcelo Gallardo, sus ayudantes de campo, Matías Biscay y Hernán Buján, y el preoarador físico Pablo Dolce.
Marcelo Gallardo dispuso dos equipos de siete integrantes cada uno y luego sumó a cada reemplazante para totalizar ocho jugadores por bando. ¿Las premisas? Mucho pase, a uno o dos toques, pero pensando cuando era necesario, circulación, rotación para evitar referencias en ataque y definición. En síntesis, un fútbol en espacios reducidos con intensidad garantizada para evaluar precisión y reacción, entre otras cualidades.
Para los suplentes actuaron Maximiliano Velazco -se lució al tapar un cabezazo proveniente del área chica-, Iván Rossi, Zacarías Morán Correa, Nicolás Domingo, Tomás Andrade, Carlos Auzqui, Rodrigo Mora y Marcelo Larrondo (estos últimos dos alternaron minutos al principio). Del otro lado, la Reserva estuvo integrada por Ezequiel Centurión, Augusto Aguirre, Kevin Sibille, Nahuel Gallardo, Alan Marcel (marcó un golazo de rabona), Santiago Sosa, Lucas Ferraz Vila y Gianluca Simeone.
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