Gustavo Lombardi cumplió el sueño de millones de chicos y con 19 años debutó en la Primera de River en un Superclásico. Un año después salió campeón del mundo juvenil y su carrera tenía un gran horizonte por delante. Tuvo que esperar su momento, pero se afianzó en el primer equipo compartiendo cancha con los 4 Fantásticos. Había conseguido mucho, aunque interiormente sentía que algo no andaba bien y a los 27 años se retiró para explorar otros caminos que finalmente lo llevaron a ser un reconocido periodista en la actualidad. En una nota con el podcast de La Página Millonaria, el ex jugador recordó su historia y confesó su particular relación amor-odio con el fútbol. ¡Escuchala!
"Antes de debutar como profesional, yo ya ponía en duda realmente si era lo que quería hacer en la vida. También quería estudiar, también quería la vida de ir a la Universidad y me hacía ruido. Entonces, ya entré mal pisado digamos. Con ciertas dudas. Después que se encamina en el 99, que tengo un par de años de estabilidad futbolística y emocional, llega un momento que se da la posibilidad de escapar", explicó el hoy comentarista de TyC Sports sobre su alejamiento de la actividad en 2002 cuando había quedado libre de River después de un paso por Alavés de España.
Lombardi aseguró que el retiro es un proceso que lo sigue elaborando aún hoy y dijo lo que lo cansó del fútbol: "Cuando vos sos jugador de fútbol, tu vida pasa por el fútbol. No es la vida igual que la de todo el mundo, tus cuidados son otros, la manera de relacionarte con la gente es otra, digo la gente que conocés y la que no conocés. Le tenés que dedicar 100% de tu cuerpo, de tu alma, de tu mente a ser jugador de fútbol. Si vos no estás preparado para mantener eso en el tiempo, te pasa lo que me pasó a mí".
El ex jugador aprendió a disfrutar el juego desde otro lugar e incluso confesó que no toca una pelota hace mucho tiempo. "Llevo 20 años sin jugar al fútbol. Hoy por hoy, después de tanto tiempo, no tendría problemas de volver a jugar al fútbol la verdad. Sinceramente no voy porque la paso mal porque físicamente no estoy haciendo nada aeróbicamente. No estoy para jugar un partido de fútbol. Las veces que intenté, habrán sido 5/6 partidos en estos 20 años que llevo retirado, la pasé mal porque te cansás, te falta el aire", aseguró.
Su carrera profesional lo tuvo en lugares de privilegio, aunque le costó afianzarse en Primera desde su debut en 1994 a quedarse con el lateral derecho en 1999. A la distancia, el ex jugador explicó que no la pasó bien en ese proceso: "A mí me iba bien en las juveniles y no podía jugar en River porque, claro, eran todos monstros los que habían en mi lugar. Y yo me sentía mal porque veía que mis compañeros de Selección: cuando volvimos del Mundial todos pasaron a ser titulares en sus equipos y yo ni concentraba. Tenía que ir a jugar a la reserva. Entonces, ahí me faltó la palabra de alguien y yo aceptarla, que me diga: ‘Tranquilo, tenés tiempo, hay que laburar’. Tuve que esperar mucho tiempo y no me lo tomaba bien”.
Además, sostuvo que en ese momento le faltó estar más abierto a escuchar a los referentes que tenía el Millonario: "Me arrepiento, pero como jugador en general fui de procesar las cosas solo. Si bien tenía el apoyo de los referentes y de mi familia, hoy con 45 años digo ‘¿por qué no me apoye más?’. Yo era ese pibe que a veces le molestaba que le marquen los errores. No me gustaba. Me gustaba que me digan: ‘che, qué bien que jugaste’. Que mal no haber aprovechado escuchar más a los otros. Entiendo a aquel Gustavo, pero digo ‘qué lástima que no pudo aprovechar las palabras o ir yo a buscarlas’”.
Lombardi encontró su lugar en el fútbol después de su retiro y se convirtió en un destacado analista en diferentes medios gráficos, televisivos y radiales. Por iniciativa de su esposa, probó en el periodismo, le gustó y hoy no se imagina en el ambiente desde otro lugar. Su trabajo lo hace criticar a ex colegas, pero aseveró que no le genera conflicto porque lo hace con respecto, sin compromisos con nadie y con ningún interés en algún cargo.
Jugar con los 4 Fantásticos: Aimar, Saviola, Ángel y Ortega
“Fue uno de los equipos que más disfruté jugar. Por cómo jugaban, por lo fácil que parecía todo adentro de la cancha con ellos. Fluían tanto que a veces se da en ciertos equipos, que sentís que no podés perder. Tengo el recuerdo de ese equipo de placer, no sufrir porque éramos pocos los que defendíamos. Todo lo contrario: salías a la cancha sabiendo que ibas a ganar. De alguna manera sabías que en algún momento se iba a dar. Fue un placer jugar con ellos”.
Lo que significa River para Gustavo Lombardi
"River fue realmente mi segunda casa, como le ocurre a todos los pibes de inferiores de todos los clubes. Vos pasás tanto tiempo en el club desde tan chico. Yo estuve desde los siete años y por suerte para mí fue muy cómoda la casa de mis padres y la de River porque me encontré con gente buenísima”.
