El año 1986 será imposible de olvidar para los hinchas de River, por aquel entonces se consagró campeón del Campeonato de Primera División 1985/86 –en el cual dio la vuelta olímpica en la Bombonera- además se consiguió la primera Copa Libertadores de la historia y la Copa Intercontinental en Japón. Pedro Troglio formó parte de ese equipo y si bien por aquel entonces no se había afianzado como titular –ya venía jugando desde 1983- recuerda cada detalle de aquellas conquistas. En 1987 ya sí logró ganarse un puesto entre los titulares y mostró una gran versión hasta que en 1988 lo vinieron a buscar tanto a él como a Claudio Paul Caniggia desde Hellas Verona de Italia.
Pedro Troglio siempre tuvo un muy buen carácter y mostró su simpatía, hace unos meses visitó el piso de F90 en ESPN y junto a Oscar Ruggeri –otro multicampeón con River- recordaron anécdotas impresionantes. El volante comenzó recordando: “Yo estaba recién operado de peritonitis, y los más experimentados del plantel en los entrenamientos me pegaban en la espalda. Después mi brigada de más jóvenes del plantel íbamos y les dejábamos ‘premios’ en la cama”. Luego contó otra de las historias de aquellas épocas: “Venían todos encapuchados a las dos de la mañana y nos apuntaban en las camas con armas de verdad cuando estábamos durmiendo”. Para finalizar agregó: “Llenamos bombitas de agua con coca y vino en la concentración y empezamos la guerra, hasta que la ligó un dirigente que estaba ahí con camisa blanca”.
El recuerdo de la final de la Libertadores
El 29 de octubre de 1986 River superó a América de Cali en el Monumental y Pedro, que estaba en el banco de suplentes aquella noche dijo en diálogo con River el Más Grande: “Llovió como nunca antes en Argentina, pero la gente no se movió ni un segundo del estadio. Fue inolvidable”. Además recordó cómo se gritó el gol del Búfalo Fúnes: “Fuimos atrás de Funes a festejar detrás del arco. Todos abajo del agua porque llovía como loco. Fue inolvidable”.
“El festejo en el vestuario fue una locura, hasta el periodismo estaba adentro. Fue un festejo imborrable. El 86 fue un año magnífico para todos, ganamos todo. Yo tenía 20 años, ja. Fue increíble lo que significó para mí estar en ese grupo lleno de figuras y campeones del mundo”, para cerrar afirmó Troglio, quien este sábado enfrentará a River como director técnico de San Lorenzo.