“Mi sueño es jugar un Mundial y mi ídolo es Lionel Messi”, declaró un pequeño Julián Álvarez cuando recién comenzaba a dar sus primeros pasos Club Atlético Calchín, el equipo de su pueblo natal. Por esas cosas del destino y también del fútbol, ese delantero veloz y atrevido al que le decían “La Arañita” cumplió con apenas 22 años todo lo que prometió en ese video, que por estos días se hizo nuevamente viral. Y lo hizo siendo protagonista directo, con goles, asistencias y actuaciones descomunales en el torneo más importante del mundo a nivel selecciones.

Casi un mes después de aquella gesta en Qatar, Julián Álvarez brindó una nota con el sitio oficial del Manchester City en la que repasó distintos momentos de la Copa del Mundo. Un relato que comienza desde el primer partido con Arabia Saudita, que el ex delantero de River definió como un cachetazo a tiempo: “Nos sirvió para darnos cuenta que teníamos que reaccionar y estar en todos los detalles. Si queríamos perder un partido, tenía que ser ese”, reconoció el cordobés, que en los últimos días conoció su nominación a los premios The Best.

Otro de los pasajes inolvidables para Julián fue su debut en la red en la Copa del Mundo: “En el partido de Polonia me tocó entrar en el once titular. Fue fuerte, estaba bastante cerca del arco, entró arriba. Cuando le pegué sentí que era gol. Fue un momento muy lindo, el primer gol en un Mundial, fue un sueño”, admitió. Claro que a los pocos días llegó el segundo, producto de una característica que lo distingue: “Fuimos a presionar al arquero, con Rodri (De Paul) se la sacamos y gol mío. Siendo delanteros somos los primeros defensores, cuando siento que puedo recuperar la pelota o molestar para que la recupere otro compañero, lo voy a hacer siempre”, afirmó el ex atacante millonario.

El tercer grito de Julián también fue bastante particular: “Íbamos uno a cero contra Croacia, la agarré cerca de la mitad de la cancha, ví que Nahuel (Molina) y Rodri (De Paul) me acompañaban pero no veía el pase claro, seguí un poco y con un poco de fortuna me fue quedando, choqué a todos y gol. Lo pongo en los mejores lugares de alegrías y momentos. Va a quedar para siempre porque después llegó la Copa”, agregó el delantero campeón del Mundo, que reveló además algunos secretos de la intimidad del grupo y contó cuál era la cábala de la Selección Argentina: “Jugábamos al truco dos días antes contra el Presidente (Claudio Tapia). Mi equipo era con Lautaro Martínez y Enzo Fernández. Nos fue muy bien”, sonrió Julián.

El último momento fotográfico de la Copa del Mundo fue la definición contra Francia y una resolución insólita, no apta para cardíacos: “Hasta el minuto 70 lo teníamos controlado, íbamos 2 a 0, jugamos un gran partido. Muchos nervios, mucha ansiedad porque en un momento nos dimos cuenta que ya no quedaba nada, que estábamos por ser campeones y nos empataron. Lo importante es que se dio”, recordó Álvarez. “Es lo que soñé desde siempre, haberlo logrado es una satisfacción muy grande porque era el sueño mío y de toda mi familia. Haberlo conseguido es una alegría inmensa y algo que no me voy a olvidar nunca de ese momento”, agregó.

El título conseguido en Qatar tuvo repercusiones en todo el mundo, pero en ningún lado tuvo el impacto y la manifestación popular que se dio en la Argentina: “Fue impresionante lo que se vivió, lo que sentimos en ese momento porque fue mucha gente que estaba acompañándonos y todos se alegraban por lo que logramos. Te hacen saber que todo el esfuerzo que pusiste le devolvimos a ellos una gran alegría”, indicó Julián. Y cerró: “Me va a costar un tiempo asimilar lo que logramos, todavía no caigo, pero tomar dimensión de lo que significa realmente a medida que va pasando el tiempo nos vamos a dar cuenta“, concluyó.

Messi, la foto y la idolatría

Una de las imágenes que se hicieron virales durante gran parte de la Copa del Mundo fue la foto que se tomó Julián Álvarez siendo muy pequeño, con apenas once años. Muchos se preguntaban cuándo, dónde y en qué contexto se la tomó. Y el propio protagonista explicó el contexto: “La foto de chico con mis hermanos y Messi, fue en el 2011, en la Copa América en Argentina. Tuvimos la posibilidad de sacarnos una foto. Siempre fue nuestro ídolo porque crecimos mirándo su fútbol”, explicó.

En cuanto a su relación con Lionel dentro del vestuario, reveló: “Yo no soy de hablar mucho y él tampoco, pero la relación es muy buena. En el vestuario me toca cambiarme al lado de él y es un privilegio. Ver todo lo que luchó por conseguir un título con la Selección, conseguir un Mundial, todos los momentos que vivió y ahora poder estar estar de este lado, poder ayudarlo, contribuir y ser parte de esto es algo único y que no lo vamos a olvidar nunca”, reconoció.