Alan Díaz se transformó en el gran protagonista del superclásico de esta tarde. Ante el contagio de coronavirus de los cuatro arqueros del plantel profesional, Gallardo debió recurrir a este juvenil de 21 años, suplente en la Reserva (donde aún ni siquiera debutó) para que ocupe el arco justo en la Bombonera en un partido decisivo para seguir adelante en la Copa de la Liga. Quienes lo conocen de las Inferiores de River aseguran que tiene una gran personalidad y así lo demostró en las horas posteriores a conocerse la noticia que lo puso en boca de todos.

Una de las decisiones que tomó Díaz después de ser convocado por Gallardo fue visitar a su amigo y peluquero Pablo Hermosilla para acomodar su peinado para un día que nunca olvidará. Y sentado en la butaca, mientras le cortaban el pelo, el arquero contó sus sensaciones. "Lo vi tranquilo, me dijo que nervios no tenía. Me dijo que los nervios ya los había vivido cuando jugó en la Selección o en la Libertadores Sub 20", le comentó Pablo Hermosilla a La Página Millonaria.

El posteo del peluquero Pablo Hermosilla, luego de cortarle el pelo a su amigo (Foto: captura Instagram @lalineabarber01).

El posteo del peluquero Pablo Hermosilla, luego de cortarle el pelo a su amigo (Foto: captura Instagram @lalineabarber01).

Luego de aclarar que usaron barbijo en todo momento y que sólo se lo sacaron para el momento de las fotos, el peluquero agregó: "Sí estaba con ansiedad para que llegue el momento del partido. Yo traté de tranquilizarlo y me dijo que estaba tranquilo, que sólo estaba esperando la hora de jugar". Sin dudas que Díaz está ante una chance que nunca imagino que llegaría de esta manera y será el futbolista más observado en el superclásico por los cuartos de final del campeonato local.

Y la alegría del juvenil es compartida por todos sus vecinos de Lanús. "En el barrio estamos todos muy contentos por esta noticia. Él es un pibe muy normal, que se maneja con mucha humildad con toda la gente", aseguró el peluquero que no tuvo que hacer un corte especial para esta oportunidad: "Me pidió el de siempre".