La carrera del futbolista profesional suele ser efímera y en un abrir y cerrar de ojos pueden pasar de la fama, la vigencia y el éxito en determinado club al retiro de la actividad. El actual plantel de River está compuesto por varios jugadores jóvenes que recién están formándose pero también hay otros más que experimentados que transitan la última etapa de sus trayectorias, tal es el caso de Germán Lux, cuyo contrato con el Millonario finaliza a fin de año.

Poroto es actualmente el tercer arquero del plantel, por detrás de Franco Armani y Enrique Bologna,  y su rol principal está más vinculado a mantener la armonía en el vestuario, aconsejar a los más chicos y ser uno de los líderes espirituales y no tanto a la de atajar. De hecho, su último partido oficial con el buzo del Más Grande fue hace más de dos años, precisamente el 16 de julio de 2019 ante Gimnasia de Mendoza por Copa Argentina, noche en la que se lució atajando dos penales.

Desde ese entonces, el guardameta de 39 años (cumplirá 40 en junio del año que viene) no volvió a estar debajo de los tres palos y según pudo averiguar este medio, Poroto tiene tomada la decisión de retirarse del fútbol cuando termine el año, esperando lógicamente que sea con el título local bajo el brazo y así llegar a 10 trofeos en el Millonario.

¿Qué hará Lux en un futuro?

Hace poco, el oriundo de Carcarañá se recibió de director técnico junto a Bruno Zuculini y Javier Pinola en la escuela de José Urben Farías que se dicta en Vicente López. Además de la chance de lanzarse a la dirección técnica, también existe la posibilidad (hoy lejana) de que Poroto empiece a trabajar en el cuerpo técnico de Gallardo como entrenador de arqueros.

Los números de Poroto en River

Lux debutó en el Más Grande en febrero de 2002 y recién se asentó como titular en la temporada 2005-06. Sin ser tenido en cuenta por Daniel Passarella para 2007, fue transferido al Mallorca de España. Tras varios años en Europa, Poroto pegó la vuelta al Millo en 2017 cuando Marcelo Gallardo necesitaba un arquero que se pusiera el buzo y ataje, ante los malos rendimientos de Augusto Batalla.

Lamentablemente, Lux tampoco estuvo a la altura, cometió errores en partidos clave y nunca terminó de dar la seguridad necesaria, por eso a principios de 2018 llegó Franco Armani, quien se adueñó del arco para nunca más soltarlo. A partir de allí, el arquero alternó entre arquero suplente y tercer arquero y desde hace algunos meses que venía meditando la decisión de ponerle un fin a su carrera. En total, atajó 107 partidos con el conjunto de Nuñez.