El Muñeco dispuso cerca de una hora de fútbol en espacios reducidos para los suplentes. De La Cruz mostró un nivel destacado, igual que Scocco.
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Mientras los titulares realizaban tareas regenerativas después de haber jugado en Salta ante Atlas, el resto del plantel jugó al fútbol en espacios reducidos. Es que Marcelo Gallardo dispuso un ensayo de 8 contra 8 en una de las mitades del campo de la cancha número 1 del predio de Ezeiza. Allí hubo varios bloques con los mismos 16 protagonistas durante casi una hora de prácticas.
En ese contexto, el Muñeco no sólo pidió mucha intensidad e intervenciones a uno o dos toques, sino también definición precisa, ambición ofensiva. “Hay que hacer goles”, exigió el DT, quien siguió atentamente las acciones y detuvo el ritmo para dar diversas indicaciones. Sin embargo, existió una interrupción inesperada: minutos después de las 11 de la mañana, Augusto Batalla causó preocupación al caer y quedar tendido hasta ser atendido por el médico y el kinesiólogo: apenas fue un susto.
De La Cruz demostró que posee varias cualidades técnicas y mucha dinámica
Por primera vez desde que llegó el martes, Nicolás De La Cruz trabajó con todos sus compañeros. El uruguayo, de gran parecido físico a su hermano Carlos Sánchez -son hijos de la misma madre, por lo que comparten el segundo apellido, Arcosa-, mostró un nivel muy interesante. Lejos de sentirse incómodo, fue opción de pase en todo momento, se acopló al circuito de juego, aportó asistencias (Carlos Auzqui, el más beneficiado) y exhibió una dinámica para resaltar, tal como Carlitos. De hecho, Iván Rossi lo sufrió en una salida de atrás porque perdió el balón.
Otro hombre de desempeño positivo fue Ignacio Scocco. El delantero estuvo fino en la resolución, mezclando tranquilidad en algunos remates y potencia cuando la situación lo demandaba. ¿Y Rafael Borré? Le tocó ser certero en un par de toques finales -por ejemplo, luego de una buena asistencia de Gonzalo Montiel-, pero no disimuló su frustración al perderse una chance inmejorable debajo del arco, elevando su tiro: “Ay, nooo, la puta madre”. Mención aparte para Alexander Barboza, de participación sorpresiva en ataque, con mucha jerarquía en los pases.
+ Los equipos en Ezeiza
De blanco: Enrique Bologna; Gonzalo Montiel, Luciano Lollo; Denis Rodríguez, Nicolás De La Cruz, Zacarías Morán Correa; Rafael Borré y Carlos Auzqui.
De verde: Augusto Batalla; Lucas Martínez Quarta, Alexander Barboza; Camilo Mayada, Iván Rossi, Exequiel Palacios; Ignacio Scocco y Tomás Andrade.
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+ GALLARDO: “Nos falta jugar como equipo”.
+ DE LA CRUZ: Puso primera en el entrenamiento.
+ ALEXIS: Fue nominado para ser catalogado como el mejor futbolista del mundo.