Si uno ve que River salió campeón del fútbol argentino en lo primero que piensa es en Marcelo Gallardo, Julián Álvarez, Franco Armani y las principales figuras que tuvo el equipo a lo largo de la Liga Profesional. Pero entre tanta jerarquía y apellidos conocidos, el Muñeco también se dio el lujo de hacer debutar (mezclado con algo de necesidad) a algunos juveniles en Primera División como fue el caso de Felipe Salomoni, actual lateral izquierdo de la Reserva.

El lateral izquierdo tuvo la chance de estrenarse el pasado 30 de agosto en Junín frente a Sarmiento, cuando ingresó en el segundo tiempo en reemplazo de Alex Vigo dentro de un River que tenía varias bajas y que terminó ganando ese partido 2 a 1. “Me acuerdo de que Gallardo me dijo que esté tranquilo, que juegue como sé y que mis compañeros me iban a ayudar. Me remarcó que vaya al espacio con máxima velocidad y que haga bien los controles. Estaba un poco nervioso, pero apenas entré a la cancha se me pasó todo. Las cosas me salieron bien”, le contó el lateral al Sitio Oficial respecto a aquel día que nunca olvidará.

Y agregó: “Cuando terminó el partido, llegué al vestuario y ahí caí que había cumplido mi sueño y me puse a llorar. Estaba muy feliz. Y después, cuando llegué a mi casa, festejamos todos emocionados con mi mamá, mi papá y mis hermanos, porque no pudieron ir a la cancha. Fue un momento que jamás voy a olvidar”.

El deseo de volver a jugar con Gallardo

Hace poco, el lateral firmó su primer contrato profesional y se ilusiona con volver a ser tenido en cuenta por el Muñeco: “Tengo que esforzarme y superarme todos los días. Hay que estar preparado para cuando tenga otra oportunidad. Mientras tanto, entrenarme día a día para mejorar. Marcelo te genera mucha confianza, sabe en qué momento hablarte y maneja los tiempos de los jugadores con mucha paciencia.

Sobre la experiencia en la Selección Sub-20

Es un orgullo para mí ponerme la camiseta de la Selección. El Bocha Batista nos dice que disfrutemos con responsabilidad, que a esa camiseta hay que cuidarla y defenderla siempre. En cuanto a los entrenamientos, la verdad es que son bastante intensos. Hacemos mucho trabajo de control y pase. Los compañeros son muy buenos, a medida que vamos agarrando confianza, mejor nos entendemos dentro la cancha”.