Mora resaltó la importancia de su doblete contra Quilmes, debido a que considera que la posición que ocupa en River demanda una cuota frecuente para vulnerar el arco rival.
Empezó de la mejor manera. Cuando todo parecía que se iba a derrumbar porque Walter Benítez adivinó la punta elegida por Rodrigo Mora, Fernando Rapallini, a instancias del asistente Juan Pablo Belatti, sancionó de forma correcta el adelantamiento. Entonces, en la nueva ejecución, el delantero charrúa pateó fuerte, arriba, lejos de que el arquero pudiera atajar el remate. Así no sólo abrió la cuenta, sino que además comenzó el Torneo de Transición 2016 con un gol pronto. “D’Alessandro me dijo ‘mirá que se adelantó’ y me dio mucha tranquilidad eso”, reconoció el autor del 1-0, acerca del primer tiro.
Ubicado decididamente como punta, a diferencias de algunos pasajes de los partidos de verano en los que actuó como extremo derecho, la Pulga inquietó bastante a la defensa de Quilmes. Estuvo compenetrado con el circuito ofensivo y también se dio el gusto de señalar el 4-1 parcial, mediante un derechazo tan potente como esquinado. “Estoy contento por convertir goles. Soy delantero de River y es una obligación hacer goles”, resaltó, en rueda de prensa.
Además de hablar sobre su tarea, Mora analizó el funcionamiento del equipo y reveló un pedido de Gallardo durante el descanso. “El primer tiempo tal vez fuimos un poco imprecisos, ansiosos. Cuando terminó, Marcelo nos dijo que tuviéramos tranquilidad, que el partido se iba a abrir. En el segundo tiempo entramos los mismos jugadores, pero con otra actitud. Cambió todo”, explicó el atacante uruguayo, de gran nivel.
+ El segundo gol de Mora ante Quilmes: