Las dirigencias de River y Colón no se ponen de acuerdo. Más allá de existir una cláusula de repesca que le permite al Millonario recuperar a Lucas Beltrán en el futuro inmediato, la letra chica del contrato generó un conflicto todavía sin resolución y que podría generarle un dolor de cabeza muy grande al propio futbolista si los clubes no logran destrabar la situación en los próximos días.

La postura del Sabalero es firme: quiere utilizar a Lucas Beltrán hasta el último día de su contrato. Si bien es cierto que el vínculo se extiende hasta diciembre, el Millonario tiene la opción de interrumpirlo una vez que finaliza una temporada y comienza la otra. Y ahí es donde aparece el principal foco conflicto: desde River entienden que el inicio de la nueva Liga Profesional a partir del próximo fin de semana marca el comienzo de la nueva temporada y que desde el punto de vista contractual, el atacante ya está en condiciones de regresar al club de Núñez para iniciar el torneo y jugar la próxima instancia de la Copa Libertadores.

 

Más allá de este tironeo entre clubes, hay una preocupación todavía mayor: si Colón incluye a Lucas Beltrán en la lista de buena fe de los octavos de final de la Copa Libertadores, podría disputar solamente el encuentro de ida ante Talleres, porque el 30 de junio tendría que sumarse al Más Grande. Lo más grave de la situación es que reglamentariamente, el hecho de jugar los octavos con el Sabalero le impediría luego disputar la Copa con el club de Núñez a partir de cuartos de final. En definitiva, si se termina dando esta situación el jugador se perderá lo que resta de la Libertadores y sólo podrá ser utilizado por River en el torneo local.

Por esta razón, las negociaciones entre las dirigencias continuarán en los próximos días. Desde Colón esperan algún tipo de resarcimiento económico o bien negociar la llegada de otro delantero. El que más interesa en el club santafesino es Braian Romero, pero River no desea desprenderse de él y el jugador, en caso de salir del Millonario, sólo sería para dar el salto al fútbol del exterior.