"El campeonato local es una cuenta pendiente"

Mientras River se prepara para el choque del domingo ante Talleres, el Muñeco admitió que el certamen local es un objetivo aún no saldado. Habló del rival, su idea sobre el sistema, la evolución de Lollo y se refirió a varios jugadores en particular.

Desde que Gallardo asumió como entrenador de River, allá por mediados de 2014, la cantidad de trofeos internacionales en las vitrinas del Monumental se duplicó. Eran sólo 5, ahora son 10. Pero River es sinónimo de exigencia y así como el Muñeco supo llevar al club a lo más alto a nivel continental, él también sabe que se le va a pedir por los torneos domésticos: “Nosotros los objetivos que nos ponemos son siempre los mismos. River es una institución que te obliga permanentemente a ganar. La exigencia es ganar. Yo nací y me crié con esta mentalidad, que no desconozco para nada. Y si bien hasta ahora han sido títulos internacionales, el campeonato local es una cuenta pendiente.”

Existen varios esquemas: 4-3-1-2, 4-4-2, 4-2-2-2, entre otros. Si el fútbol pudiera resumirse a un número telefónico, ésta bien podría haber sido la evolución del River de Gallardo a lo largo de los últimos dos años. Pero el Muñeco no cree que el dibujo táctico con el que se empieza un partido puede describir el sistema de juego de un equipo y lo dejó bien en claro durante un diálogo con el programa Sucesos Deportivos, de Cadena 3: “Soy un técnico que no le pone número a los jugadores. Trato de ver cuáles son las virtudes de los futbolistas que tengo y, en función a ello, hacer funcionar al equipo. No me gusta la numerología. Decir que jugamos un 4-2-2-2 es muy rígido. Muchas veces jugamos con dos en el fondo, con un volante central por delante de los centrales, con laterales que pasan… cuando el jugador se va moviendo ya no se respetan los números, salvo que sea rígida. Y mis equipos no lo son”.

Sobre el dibujo táctico: “No me gusta la numerología”

En el horizonte inmediato aparece la visita a Córdoba, una ciudad con la que el DT tiene una relación bien especial: “Yo tengo sangre cordobesa. Mi padre y toda su familia son cordobeses. Pasé muchos años de mi infancia en Córdoba visitando tíos y primos. Es una ciudad a la que siempre me gusta ir”. Y elogió a Talleres, rival del próximo domingo: “Vamos a enfrentar un club de los grandes de la provincia, que viene de vivir un proceso bastante largo, en una categoría que se le hizo muy complicada. A partir de ahí, resurgió y está volviendo con toda su ilusión, con toda su gente que va a llenar el estadio y hacerse sentir. A mí me gusta que Talleres vuelva a estar en Primera”.

Tengo sangre cordobesa

Para este encuentro, Gallardo no descartó la posibilidad de contar con Luciano Lollo: “Viene trabajando muy bien, cada día se lo ve mejor. El parate de él fue importante y de a poco va retomando su forma. De seguir así, el domingo va a tener chances de estar entre los convocados”.

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El cariño de la gente: “No deja de sorprenderme. Ya lo había vivido como jugador, pero se multiplicó en estos años como entrenador. La gente se ha identificado conmigo porque se ha identificado con el equipo. Lo que ha transmitido el equipo fue muy grato, hubo un ida y vuelta que hace muchos años no se vivía. Y eso fue algo sensacional”.

Augusto Batalla: “Es un arquero de muchísimas condiciones, viene desde juveniles, donde ya se venía destacando por su riqueza técnica abajo de los tres palos y por su personalidad. A su corta edad, ya muestra una gran personalidad y eso es muy meritorio. Esperemos que pueda seguir creciendo porque es joven. Le toca hoy jugar en un arco enorme, pero él tiene las cualidades para hacerlo. Y además está reemplazando ni más ni menos a un arquero que a nosotros nos dio mucho y que la gente recuerda con muchísimo cariño como lo es Barovero.

Lucas Alario: “Tiene muchísimo potencial, todavía no ha tocado su techo. Tiene mucho por crecer y está en el camino del aprendizaje, si bien ya ha mostrado y ha hecho una muy buena y rápida adaptación. No lo sufrió para nada, se puso la camiseta, jugó y al poco tiempo empezó a hacer goles importantes. Está en una etapa de evolución”.

Ramiro Funes Mori: “Siempre dije que fue uno de los jugadores que más me sorprendió cuando me hice cargo del equipo. Me sorprendió su destreza física y su calidad técnica, que yo desde afuera no la notaba. Desde que empecé a trabajar con él notamos que tenía las cualidades para convertirse en lo que hoy es, un gran central todavía con un mundo por delante porque apenas tiene 24 años”.

Mercado y Kranevitter: “Me enorgullece y me llena de satisfacción verlos en la Selección”.

Messi: “Acostumbrarte a jugar con el mejor del mundo y, a veces no tenerlo, es una distancia enorme. Argentina lo sufre, porque no hay una estructura de equipo que se sostenga. Debería pasarle al Barcelona, pero el Barca sí tiene una estructura. Allá él es la frutilla del postre. Acá no pudimos lograrlo en la Selección”.

¿Cuando quiso ser DT?: “Hubo un momento en el que me empecé a hacer preguntas y ahí hice el click. Me empecé a preguntar cómo y para qué me servía el entrenamiento y me di cuenta que me empezó a gustar esa materia. Pasó allá por los 28 o 29 años. Y ahí dije ‘el día de mañana voy a ser técnico’, pero no antes.

Su estilo: “Yo tengo que convencer a los futbolistas de que tienen que interpretar una idea. Y para eso les tengo que argumentar, decir la verdad, no ser hipócrita, no tengo que mentirles, tengo que ser frontal. El jugador va a terminar respondiendo si te cree”.

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