En el ojo de la tormenta tras sus flojas actuaciones ante San Lorenzo y Racing y presionado por la llegada de Lux, Augusto Batalla respondió con creces en sus últimas tres presentaciones. El 1 no quiere largar el arco.
Si algo se suele remarcar sobre las virtudes de Batalla es su personalidad. Con 21 años, se hizo cargo del que muchos llaman el arco más grande del mundo y justo después de la salida de un ídolo como Barovero. Una enorme responsabilidad que afrontó con aciertos. E inevitablemente, también con errores. Algunos de ellos hicieron cuestionar su titularidad en más de una ocasión.
Como todo arquero nacido en el club, contó con un gran apoyo desde el comienzo. Sin embargo, desde aquella floja salida contra Tévez en el Monumental y los errores en la final de Copa Argentina ante Central, se lo comenzó a cuestionar. Su peor momento llegó tras los encuentros con San Lorenzo y Racing en la recta final del torneo. Allí, Augusto tuvo responsabilidad directa en dos goles (el del chileno Díaz ante el Ciclón y el de Marcos Acuña contra la Academia) y colmó la paciencia de un gran sector de los hinchas. Hasta Gallardo pareció soltarle la mano admitiendo que estaba entre las posibilidades traer un arquero, una opción que se concretó días después con la llegada de Lux.
Pero inmerso en el ojo de la tormenta, afloró nuevamente su personalidad. Figura ante Aldosivi y vital en el empate sin goles en Santa Fe, Batalla dejó por tercera vez consecutiva su arco en cero con dos grandes atajas frente a Guaraní. La del segundo tiempo, con los pies, determinante para evitar la igualdad de los paraguayos y el destino de la serie.
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“Dimos otro paso importante hacia el objetivo! Ahora a trabajar para la vuelta”, tiró en su cuenta de Twitter tras el triunfo en Asunción. Él sabía que se jugaba mucho. Gallardo también lo valoró: “Me da satisfacción el nivel que tuvo. Se lo castigó por errores en partidos puntuales. Tiene apenas 21 años. Se hizo responsable de un arco muy importante, sustituyendo a un jugador que el hincha de River respetó mucho, Barovero. Respondió bien más allá de esos errores, que los va a seguir teniendo. Sacó dos pelotas muy buenas en momentos claves del partido”.
Para la vuelta, se viene una pelea mano a mano con Lux. Lo que está claro, es que Augusto va a dar Batalla hasta el final.
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