Para saber gozar hay que saber sufrir, pero también tener muy buenos pateadores de penales cuando las cosas no salen en el tiempo reglamentario. Es lo que le sucedió a la Selección Argentina frente a Países Bajos en el encuentro correspondiente a los cuartos de final de la Copa del Mundo. Luego ser ampliamente superior al elenco de Van Gaal, los dirigidos por Scaloni terminaron padeciendo el juego aéreo y los balones detenidos y pasó de estar 2 a 0 arriba a irse al tiempo suplementario por culpa de un 2-2 inesperado.

Cuando las piernas pesaban y el cansancio era notorio, Lionel Scaloni decidió mandar al campo de juego a Gonzalo Montiel en reemplazo de Nahuel Molina, autor del 1-0, luego de realizar un despliegue tremendo. El ex lateral de River le dio salida al equipo, tuvo un par de desbordes interesantes y participó en los últimos ataques en los que Argentina parecía que se llevaba puesta a Países Bajos. Sin embargo, el partido terminó igualado en los 120 minutos y lo mejor de Cachete apareció en la serie de penales.

 

Luego de las ejecuciones de Lionel Messi y Leandro Paredes, llegó el turno de Gonzalo Montiel. En el medio, Dibu Martínez ya había atajado dos remates y la Argentina estaba ante la gran chance de mantener una diferencia casi indescontable. El marcador de punta derecho, que ya se había convertido en un especialista cuando vestía la camiseta de River, disparó con mucha precisión contra el palo izquierdo del arquero, que amagó a volar sobre el otro poste.

Argentina terminó ganando 4 a 3 en la serie de penales y consiguió la clasificación a las semifinales de la Copa del Mundo, pero hay un dato que no puede pasar de largo: con la ejecución de esta noche, Gonzalo Montiel llegó a su noveno remate que termina en gol sobre un total de nueve penales. Es decir, tiene un cien por ciento de efectividad en los remates desde los doce pasos. Una garantía de confianza y personalidad para anotar cuando las papas queman.

La tanda de penales contra Países Bajos