Son pocas las personas en el planeta que pueden transmitir tanto cariño y apego como Ariel Arnaldo Ortega. Y en una entrevista absolutamente sin tapujos, el Burrito abrió las puertas de su corazón y desnudó hasta sus sensaciones en los momentos más difíciles de su carrera. Algunos excesos lo llevaron a tener comprotamientos indebidos de los cuales está plenamente arrepentido, y es por esto que explicó con lujo de detalles todo lo que vivió en aquellos años difíciles para él.

 

"Fue una etapa de mi carrera en la que estaba muy rebelde. No sé lo que me pasó. Me agarró el pelotudeo de grande, la verdad es que no le encuentro una explicación. Por ahí estaba como peleado y enojado con la vida. Con los periodistas, mis compañeros, con todo el mundo. Me he mandado muchas cagadas, que en su momento me dolieron y no las pude manejar", comenzó relatando Ortega al respecto en diálogo con Atilio Costa Febre.

Y las confesiones al respecto no se detuvieron, ya que además el jujeño resaltó la importancia del apoyo de su entorno cercano, pese a que él trataba de marcar distancias con todo el que se le cruzaba. "Hacía todo al revés para ponerme a todo el mundo en contra, inclusive a mi familia. Y la verdad que no lo lograba porque había mucha gente que me quería mucho. El hincha de River y mis compañeros siempre me bancaron a pesar de todo. De las cosas que más me arrepiento es de haberles fallado a ellos y de faltar a algún entrenamiento. Son de las cosas que más me duelen, pero por suerte pude superar todo aquello y hoy por hoy estoy muy bien. Ahora disfruto mucho la vida de mis hijos, mis familia y mis amigos", sentenció a pura sinceridad.

Finalmente, el ídolo de River se hizo un espacio para hablar íntimamente sobre lo que fue su relación con Daniel Passarella con el correr de los años. Desde el gran afecto que sentía por él cuando lo hizo debutar en Primera y le brindó su ayuda en momentos importantes de su vida, hasta la decepción y el enojo que sintió por él en el momento que le tocó ser presidente del club.

"Es inentendible lo que pasó con Passarella. Él me hizo debutar de muy chico y me ayudó en miles de cosas en el inicio de mi carrera, me guió mucho. Pero después pasaron muchas cosas malas en River que a mí como hincha me partieron el alma. Él empezó a tener malos tratos y manejos con gente que lo quería mucho, porque nosotros eramos una camada de pibes que en aquella época lo amábamos. Y después ver todo lo que hizo con el club me dolió en el alma, porque yo amo a River y siempre quiero que le vaya bien. No le guardo rencor ni bronca a Daniel, pero la verdad es que después de todo lo que pasó no lo vi nunca más", cerró.