Otra larga novela del mercado de pases de River que llega a su fin. Tras un extenso ida y vuelta, con intercambio de muchos papeles mediante, el Millonario concretó la continuidad de Giuliano Galoppo y selló las salidas definitivas de Enzo Díaz y Gonzalo Tapia, ambos a préstamo en San Pablo (ahora no volverán y pasan a ser propiedad del elenco brasileño).
Desde el primer momento, la intención de River siempre fue retener a Galoppo, cuyo préstamo vencía el 31 de diciembre y había una opción de compra de poco más de tres millones de dólares. Pero en vez de ejecutarla, las instituciones se sentaron a negociar para hacer una operación compuesta que logró firmarse anoche, cuando el ex volante de Banfield logró desvincularse definitivamente de San Pablo.
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Cómo fue la operación de Galoppo, Tapia y Enzo Díaz
Según pudo averiguar La Página Millonaria, el Más Grande se adueñó del 50% del pase de Galoppo, tasado en 3 millones de dólares. Sobre esa base de dinero, se incluyeron los pases de Díaz y Tapia, ambos con préstamo vigente en San Pablo, pero cada operación se individualiza en el valor monetario ya que por cada jugador y su respectiva inscripción en el TMS (Transfer Matching System, la plataforma de FIFA que regula y valida las transferencias internacionales) hay que pagar distintos impuestos.
River se aseguró la continuidad de Galoppo.
Los brasileños se quedaron con el 60% del pase de Enzo Díaz, tasado en 2 millones de dólares (River mantiene el 40% restante) y, en principio, con el 70% de Gonzalo Tapia (el porcentaje fue motivo de discusión en los últimos días de negociacion, River mantendría el 30% restante). Galoppo, por su parte, renovó contrato en Nuñez hasta el 31 de diciembre de 2028 con una cláusula de salida de 12 millones de dólares. San Pablo aún es dueño de la otra mitad de los derechos económicos de Giuliano.
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El año de Galoppo en River
Desde que llegó, Gallardo dejó en claro que el mediocampista era de su gusto futbolístico y llegó a ganarse la titularidad en el primer semestre, pero dos lesiones en febrero y marzo le arrebataron la continuidad. Para la segunda parte del año se convirtió en una pieza fundamental en el arranque del Torneo Clausura, ingresando desde el banco de suplentes y siendo el máximo goleador de la Banda durante el certamen. Cerró la temporada con siete goles y una asistencia en 34 partidos.
