Enzo Pérez es el gran emblema de River. Más allá de ser el portador de la cinta de capitán y de la ascendencia que tiene dentro del vestuario, el mediocampista mendocino es el futbolista con el que más se identifican los hinchas millonarios. Por sus títulos, por su entrega, pero sobre todo por su fanatimo por el Más Grande. Se lo hacen sentir cada vez que el equipo de Martín Demichelis juega ante su público.

Luego de la tremenda ovación que se llevó en amistoso frente a Universidad Católica de Chile en San Nicolás, Enzo Pérez volvió a ser protagonista de todas las miradas en su vuelta al Monumental. Después de los últimos rumores que daban cuenta de una discusión con el entrenador y de algunos problemas en el vestuario, el capitán millonario recibió el enorme respaldo de su gente. Cuando el equipo salió a hacer la entrada en calor, fue el futbolista más aclamado. Lo mismo sucedió cuando la pantalla gigante y la voz del estadio anunciaron la formación frente a Arsenal.

Las muestras de devoción hacia el capitan del Más Grande no quedaron ahí. Hubo una nueva ovación en esa jugada en la que participó de una pared con Nacho Fernández y terminó sacando un zurdazo que sacudió el travesaño. Unos minutos después, Martín Demichelis decidió que ingresara Matías Kranevitter y Enzo Pérez volvió a ser el destinatario de todos los aplausos. El Monumental se rindió nuevamente a los pies del mendocino, que salió emocionado y se llevó una de sus manos al corazón, allí donde late el escudo de sus amores.

El abrazo con Demichelis

El cambio que introdujo Martín Demichelis en el segundo tiempo para reemplazar a Enzo Pérez estuvo acompañado por otro gesto que los hinchas estaban esperando. El capitán del Más Grande le entró la cinta a Franco Armani, salió del campo de juego y cuando se dirigía al banco de suplentes se cruzó con el DT millonario, que lo abrazó y lo felicitó por el gran partido que disputó. Lo mismo sucedió con Germán Lux y Javier Pinola. ¿Una señal de reconciliación?