River se volvió de Brasil con las manos vacías y un manto de dudas futbolísticas, al menos en los hinchas. Un primer tiempo aceptable ante Fluminense que se derrumbó completamente en el segundo, potenciado por la expulsión de González Pirez (horroroso arbitraje de Ostojich) y los cambios extraños que dispuso Demichelis en pleno partido. Un combo letal que hace que el Millonario haya quedado último en el Grupo D de la Libertadores.
La zona quedó con Fluminense en los más alto (nueve puntos) y luego el resto de los equipos con tres unidades, pero River es el que tiene peor diferencia de gol (-4 contra -3 de Sporting Cristal y 0 de The Strongest). Ahora habrá un parate de dos semanas por Libertadores y los dirigidos por Micho volverán a jugar el 25 de mayo, en un partido que será a todo o nada.
River continúa dependiendo de sí mismo para clasificarse a octavos gracias a que anoche The Strongest perdió en su visita a Perú, pero de igual manera está obligado a vencer en el día de su aniversario a Sporting Cristal en el Estadio Monumental de Lima desde las 21.00.
El equipo no puede permitirse una derrota ya que se vería obligado a agarrar la calculadora. Con tres triunfos o dos y un empate, estará en octavos de final, pero con cualquier otra combinación no dependerá de sí mismo y deberá poner los ojos en lo que hagan sus rivales directos (Sporting Cristal y The Strongest, ya que Fluminense tiene un pie y medio en octavos).