Montiel: "Es un orgullo que Gallardo diga que soy su bombero"

En una charla exclusiva con La Página Millonaria, el defensor de River valora todos los logros obtenidos en tan sólo 22 meses como integrante del plantel profesional desde su estreno. Además, reveló que jugó en una posición impensada cuando estaba en la Reserva, confesó cuál es su apodo desconocido públicamente y explicó de qué manera se dio su arribo al club.

Gonzalo Montiel hizo su presentación oficial el 30 de abril de 2016, cuando River empató 0-0 frente a Vélez Sarsfield, en el estadio Monumental. Allí le tocó ingresar al principio del segundo tiempo como lateral derecho en una línea de tres, aprovechando que el rival jugaba con uno menos por la expulsión del paraguayo Blas Cáceres. Desde entonces, atravesó distintos momentos en Primera, aunque siempre como una opción a mano para diversas situaciones al punto de haber sido lateral izquierdo en un Superclásico de verano.

“Es un bombero”, definió Marcelo Gallardo, consultado en conferencia de prensa por La Página Millonaria. Semejante frase corresponde a la capacidad del joven de 21 años para adaptarse a las circunstancias requeridas tácticamente. Para Montiel “es un orgullo”, aunque no se confunde y considera que tiene mucho para evolucionar, siempre vistiendo el manto sagrado porque está feliz en River

Tras sufrir una distensión en el recto anterior de la pierna derecha, como consecuencia del esfuerzo realizado hace una semana frente a Boca, el defensor nacido en González Catán, provincia de Buenos Aires, demoró bastante en llegar a la entrevista porque le llevó tiempo el trabajo específico de kinesiología. De no mediar problemas, apenas una semana más demandará la rehabilitación. Mientras tanto, en diálogo con La Página Millonaria, dejó en claro la satisfacción que experimenta en El Más Grande.

-¿Cómo fue tu llegada al club?

-Vine a los 10 años, hice una prueba, me dijeron que siga yendo y, a los cinco días, justo había un viaje en la categoría. Me acuerdo que citaron a 19 jugadores y yo no estaba. Quedé sentado solo, vino Luis Pereyra y a Gustavo Fermani, el técnico, le dijo “incluilo a Montiel”. Ahí ya había quedado. Nunca se lo pude agradecer.

-Estás desde chico en River, ¿qué significa este club para vos?

-Siempre lo digo, River es especial porque estuve casi toda mi vida en esta institución. Estoy feliz de estar acá.

-¿Cuál era tu puesto cuando llegaste a River?

-Siempre jugué de central, pero en Reserva lo hice en varias posiciones. La verdad que no me molesta jugar en otra posición. Llegué a jugar de 8 para la Reserva, contra Boca, en el año 2016, lado de (Joaquín) Arzura. Él de 5 y yo de 8.

-¿Cuál es tu balance de estos casi dos años en la Primera de River?

-La verdad que no me esperaba estar así, contento por todo lo que pasé. Cuando debuté, nunca pensé que ahora iba a disfrutar de este campeonato (NdeR: se refiere a la Supercopa Argentina). Estoy trabajando y creciendo para seguir ganando más cosas en este club que es tan importante.

-¿Qué recordás del debut contra Vélez?

-Me acuerdo que yo estaba en la pensión y me llamaron un viernes porque tenía que ir a concentrar con el equipo. No me daban las manos para leer el mensaje, no sabía qué hacer. Después me concentré por si me tocaba entrar por más que sabía que iba al banco. Gracias a Dios, se me dio y pude debutar.

-¿Qué fue lo mejor desde que debutaste?

-Ahora es ganarle a Boca, desde chico nos transmiten que siempre hay que ganarle a nuestro rival, y más en una final. Lo disfruté mucho porque vine de Inferiores y la verdad que me costó mucho llegar.

-¿Cómo se juega un partido como el Superclásico? Es distinto al resto

-A los que venimos de Inferiores nos transmiten que es un partido aparte, que es un Superclásico y se juega todo. Estoy feliz por cómo se ganó la final y por mis compañeros. Lamentablemente, veníamos perdiendo y, gracias a Dios, se pudo ganar.

-Te tocó renegar con la velocidad de Cristian Pavón, ¿había alguna indicación puntual al respecto? ¿Cómo te preparaste para semejante desafío?

-Ya lo había marcado en el clásico anterior. La verdad que es un jugador rápido, pero sabíamos que siempre iban a jugar para ese lado, así que supe cómo tenía que marcarlo. Primero me costó un poco para acomodarme, pero después me indicaron cómo tenía que hacerlo para que no sacara centros ni encarara, así que pude hacerlo bien.

-¿Cuáles fueron esas indicaciones?

-Antes del partido, siempre se mira al jugador, se estudia qué cosas hace. Creo que pude hacerlo bien.

-¿Qué te pide Gallardo como lateral por derecha?

-Es distinta a la de central porque de 4 no tenés la cancha de frente como la tenés de central. A Saracchi y a mí Marcelo nos pide abrirnos para ayudar en el ataque. A veces no se da porque siempre queda el espacio, entonces los equipos ahora nos conocen y nos atacan por ese lado, tenemos que mejorar en la marca.

-Cuando River tiene una pelota parada a favor, tenés facilidad para anticiparte en el primer palo o en el salto, ¿cuáles son los secretos para lograr eso?

-Marcelo siempre pide que vaya uno al primer palo. Como soy un poco rápido, voy siempre para atacarlo y la verdad que me gusta.

-¿Cuáles creés que son tus virtudes principales y en qué creés que tenés que mejorar?

-Sé que tengo que mejorar, entreno acá para mejorar. Este club siempre te pide cosas y uno está dispuesto a mejorar, tratar de aprender día a día.

-Gallardo dijo que sos su bombero, ¿qué te causó esa frase?

-Es un orgullo que te el técnico te diga eso.

-¿Cuál es tu objetivo para este año?

-La Copa Libertadores es el objetivo, ojalá que se nos pueda dar.

-¿Cuál es tu apodo?

-Me dicen Cachete. Queda en el grupo.

-¿Te gusta o preferís que no trascienda?

-Sí, sí, me gusta. Desde Inferiores me decían Cachete, así que no me molesta.

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