River fue una sombra a nivel defensivo y perdió un Superclásico que tenía para ganarlo después de darlo vuelta. El rendimiento en la última línea fue preocupante, sobre todo por la final que vendrá.
La idea de River estuvo clara desde el comienzo. Presionar bien arriba, con Ignacio Fernández siguiendo a todos lados a Bentancur y Andrés D’Alessandro de enganche para no dejar tocar la pelota a Gago.
Sin embargo, el mediocampo falló a los 7 minutos y le permitió a Pavón tener la primera ocasión clara de peligro, con una corrida hasta el área y un remate que Augusto Batalla despejó de buena manera.
+ La atajada de Batalla:
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La respuesta de River llegó dos minutos después, con una jugada preparada de un tiro de esquina. El Cabezón tocó para Sebastián Driussi, quien no pudo darle potencia a su remate, contenido sin problemas por Werner. La Banda acorraló a Boca y Lucas Alario tuvo su chance, con un taco despejado por Peruzzi en el área chica.
Pero River tiene lapsos de desconcentración y así, a los trece minutos, Bou aprovechó la siesta de los centrales y puso en ventaja al eterno rival. El Millonario estuvo a punto de empatar segundos más tardes, con un zurdazo de Gonzalo Martínez que el arquero logró despejar.
Los dirigidos por Marcelo Gallardo cayeron en un momento de confusión total y Boca estuvo a punto de ponerse 2 a 0, con un par de ocasiones clarísimas, primero de Tevez y luego de Bou, ante la mirada atónita de una defensa en la que sólo Jonatan Maidana lograba sacar alguna pelota.
Y así como River tiene lapsos de confusión, también se ilumina por momentos. En gran parte, porque tiene a Driussi. El pibe volvió a sacar a La Banda de la modorra y empató el partido con una volea inatajable.
El Más Grande se agigantó tras la igualdad y el Pipa aprovechó un centro perfecto para gritar por primera vez en un Superclásico y poner en ventaja a los del Muñeco, que en una ráfaga dieron vuelta una historia muy adversa.
El segundo tiempo empezó con una jugada clarísima para Alario, quien recibió un centro en el área chica y le erró al arco, cosa más que inusual en el santafesino. Y en un arranque electrizante, el Pipa tuvo otro cabezazo que rozó el palo y, en la respuesta, Boca tuvo un mano a mano en los pies de Pavón, pero Batalla demostró su crecimiento notable y la sacó al corner.
Sin embargo, el arquero tuvo un error grosero a los 15 minutos, salió muy lejos y perdió la pelota con Tevez, quien puso el 2 a 2 en el mejor momento de River e igualó la historia.
A partir de allí, River se cayó a pedazos, dejó que Boca creciera y el Superclásico se le hizo cuesta arriba nuevamente al equipo. Tevez puso el 3 a 2 con un derechazo de otro partido y lo liquidó Centurión en la última jugada, para dejar en claro que tiene serios problemas defensivos.
Así se terminó el partido, con un River totalmente disminuido y el grito de la gente. “Jugando bien o jugando mal”, cantaron los hinchas. Y razón no les falta, porque al Más Grande le queda una final y la tiene que ganar.
+ GOLES: Los gritos en el Monumental.
+ D’ALESSANDRO: Saludo con sabor a despedida.
+ FOTOS: Las imágenes del Superclásico.
+ POSICIONES: Así está la tabla.