Una de las grandes injusticias del fútbol en los últimos tiempos fue que Marcelo Barovero no haya tenido chances en la Selección Argentina. Durante varios años fue el mejor del país, pero ni Alejandro Sabella ni Gerardo Martino ni Edgardo Bauza lo convocaron. Y recientemente, el ex arquero habló por primera vez sin filtro sobre el tema.
Las reiteradas decisiones sorprendían en esos momentos no solo a los hinchas de River, sino a todo el fútbol argentino en general. Trapito tuvo tres años de excelencia entre 2014 y 2016, siendo clave en varios títulos del Millonario, entre ellos la Copa Libertadores 2016.
En esa época, el nacido en Porteña fue consultado varias veces, pero fiel a su estilo de humildad y perfil bajo, siempre prefirió no polemizar. Ya retirado, a sus 41 años, dio una entrevista en la que sí pudo reconocer sus sensaciones. “Todos tuvieron una chance en la Selección Argentina menos yo”, firmó con tono de lamento Barovero, en diálogo con Clarín.
Qué dijo Barovero sobre su falta de oportunidades en la Selección
Trapito recordó que “fue un poco rara esa etapa porque no llamaban a los chicos del plantel” aún pese al gran momento de River en el fútbol argentino y sudamericano. “Siempre decíamos que llegaban a Ezeiza, cruzaban el Atlántico y ya se los convocaba. Jugador que se iba, antes de que aterrice ya era convocado. Así que era medio raro. Eso es lo que hablábamos internamente”, admitió.
Si bien Barovero aclaró que nunca entró en conflicto porque “siempre consideré que era una decisión o un gusto del técnico y nada más”, sí reconoció que “merecí alguna oportunidad más porque en general la tuvieron todos” y enumeró: “Mercado terminó siendo mundialista, Maidana fue una vez, Funes Mori también. Lo mismo con Kranevitter. Todos tuvieron una chance menos yo“.
En ese entonces, quien estaba asentado en el arco de la Selección era Sergio Romero. “En sus 6 u 8 años que estuvo era indiscutible, pero yo creo que podría haber estado entre los 3 arqueros”, resaltó MB. “Tenía mucha ilusión, te soy sincero y respondo desde la lógica. Nunca me gustó ser tribunero ni echar leña al fuego, así que lo entendí de esa manera”, completó Trapito, sin polemizar pero sí lamentando cómo se dieron las cosas.
