River perdió con Palmeiras y quedó eliminado de la Copa Libertadores 2025. Esta vez, el equipo estuvo a la altura de la serie de cuartos de final, pero fueron los errores propios los que marcaron la diferencia ante un rival con mucha jerarquía y armado para salir campeón. Desde las decisiones de Marcelo Gallardo hasta las equivocaciones individuales o colectivas de los futbolistas.
“Hay que hacernos cargo de nuestros errores. En la serie, en definitiva, estuvo en los detalles de atención. La jerarquía de ellos la conocíamos y ellos conocían la nuestra, pero los detalles inclinaron la balanza a su favor“, sintetizó el Muñeco en conferencia de prensa.
Los errores de River en la ida
Empezando por el planteo en la ida. Con la línea de cinco defensores, Palmeiras se impuso en la mitad de la cancha. Y con ese gol tempranero de pelota parada de Gómez donde falló Portillo en la marca ya arrancó en ventaja. El Millonario ligó en ese primer tiempo, y Gallardo curiosamente no hizo cambios. Así, sobre el final llegó el 2-0 con una mala coordinación de los zagueros aprovechada por Vitor Roque.
En el segundo tiempo, el Más Grande mejoró y fue, por momentos con fútbol y otros con empuje. Pero la diferencia era grande, y con Palmeiras plantado atrás no pudo generar muchas chances claras. Sí logró descontar y casi lo termina empatando Borja. En Brasil, había que hacer el partido perfecto y lo hizo en los primeros 45 minutos.
Los errores de River en la vuelta
En Allianz Parque, los errores individuales fueron casi todos de Kevin Castaño, quien no solo erró un gol imperdonable que hubiese sentenciado el 2-0 en el final del primer tiempo. El colombiano hizo amonestar a Portillo y Enzo Pérez, regalando dos pases insólitos que derivaron en lógicas faltas tácticas de los dos mediocampistas.
Después de un correctísimo primer tiempo, todo se fue por la borda rápido en el complemento. Es que a los 6 minutos, River marcó pésimo una pelota parada y llegó el 1-1. En la segunda jugada de un córner, Piquerez recibió solo por izquierda, metió un gran centro pasado, Rivero (perdió a Roque) y Martínez Quarta se chocaron entre ellos, Salas y Galoppo se quedaron mirando, y VR apareció solo para el empate. Con algo de complicidad de Armani dando un rebote corto.
Tras un pasaje de confusión, River se acomodó y tuvo dos ocasiones claras: una genialidad de Salas en el área y un buen remate de Borja asistido por Lencina. Pero no fue la superioridad del primer tiempo y tampoco fue un aluvión ofensivo. El único error lo volvió a pagar carísimo: sobre el final, se durmió en un tiro libre de Palmeiras y todo terminó en penal, expulsión a Acuña y gol. Es cierto que una polémica acción de Andrés Matonte, quien cobró una mano inexistente sin verla y luego dejó que se juegue pese a nunca a haber dado la orden.
