River tuvo un buen arranque gracias al gol tempranero de Maximiliano Salas. El Millonario se fue al entretiempo ganando por la mínima, sabiendo que un gol más lo clasificaría, al menos momentáneamente, a la semifinal de la Copa Libertadores. Sin embargo, el empate de Vítor Roque complicó los planes de un equipo que no pudo brillar en el complemento.
Sin tanta intensidad, River buscó el segundo y tuvo algunas buenas oportunidades. Sin embargo, el partido llegó a sus instantes finales con empate a uno. Sobre el final, cuando el partido se acercaba al tiempo del descuento, una desconcentración del Millonario y posterior falta de Acuña le permitieron al Verdão ponerse en ventaja en el partido mediante un penal.
José López cambió la pena máxima por gol y, tan solo unos minutos más tarde, convirtió otro tanto para sellar el 3 a 1 definitivo. Así fue como River, quien salió a jugar con más ímpetu que en la ida, se quedó sin Copa Libertadores. Una dura eliminación, sobre todo porque el Millonario estuvo con vida hasta los instantes finales.
