River cayó en los penales frente a Independiente Rivadavia de Mendoza y quedó eliminado de la Copa Argentina, después de haber jugado unos noventa minutos apáticos y sin actitud para buscar el resultado. La responsabilidad máxima del presente es de Marcelo Gallardo, pero hay futbolistas que siguen teniendo oportunidades y en la noche de Córdoba volvieron a estar lejos de las expectativas, colmando también la paciencia de los hinchas.
El 2025 del Millonario está lejos de las expectativas, no solo por la institución que está obligada a pelear los frentes hasta lo último, sino también por los dos mercados de pases más recientes, en los cuales se gastó una gran suma de dinero. Sin embargo, son pocos los refuerzos que están dando la talla, más allá de los que ya estabam, y los que mantenían un buen camino parecen haberlo desechado en el Mario Alberto Kempes.
Hubo decisiones inexplicables por parte del Muñeco y una de las primeras en ser notadas por la gente fue la inclusión de Ignacio Fernández, quien a sus 35 años vuelve a tener un rendimiento bajo y no había esperanzas en que pueda hacer un buen partido. Lo curioso es que el entrenador sigue depositando su confianza en él por encima de otros talentos que están surgiendo como Santiago Lencina, a quien dejó afuera del banco de suplentes.
No dieron la talla: Nacho y qué otros futbolistas cansaron a los hinchas
El segundo en cuestión es Miguel Borja. El delantero viene de un año y medio en el que claramente está falto de gol, pero lo que exaspera también son sus actuaciones dentro del campo de juego y sin tener ánimo de asociarse con sus compañeros. Cada vez que aparece, hay cierta sensación de que no hay rumbo en el ataque y tuvo la desgracia de haber errado su penal.
Otro de los que también está en falta de demostración en los partidos importantes es Facundo Colidio. Sus apariciones con destellos de calidad y goles logran confundir la idea de que no está hecho para este tipo de desafíos. En esta ocasión se lo vio mucho más errático, sin poder terminar las jugadas y perdiendo pelotas sin sentido cuando había posibilidades de generar peligro. Kevin Castaño, que supo tener un buen nivel, sigue en baja y haber pagado $12.860.000 euros por un mediocampista que tiene dificultades para patear la pelota es otro síntoma del 2025 olvidable.
Sebastián Driussi está dentro de los más discutidos de la noche, principalmente por no haber tenido peso en el rato que jugó y por lesionarse nuevamente. El pensamiento que queda es que se pagó 10 millones de dólares por un delantero que suma pocos partidos por temporada. Por último, Giuliano Galoppo, que venía siendo de los más aprobados, fue apuntado por la manera que pateó su penal. La situación no estaba para cancherear y desperdició uno de los disparos.