Todo lo que se vivió desde elpasado sábado 24 de noviembre hasta la fechaes un verdadero bochorno. Desde los piedrazos al micro de Boca, el manoseo hacia los hinchas de River que esperaron durante más de siete horas un encuentro que no se iba a jugar, hasta los reclamos insólitos del eterno rival y la decisión de Conmebol de llevar la final a Madrid (España).
Tras el escandaloso cambioescenario que se ha presentado en la previa del choque decisivo, que tendrá lugar en el estadio Santiago Bernabéueste domingo desde las 16.30 horas de Argentina, Juan Román Riquelmedialogó conConfesiones -por Radio Mitre- y reconoció que la final no será igual.
“Ahora el partido es más parejo. En los Superclásicos,el local siempre tiene ventaja. Ahora se va a jugar en otro país”, aseguró el ídolo del eterno rival, dejando bien en claro que el cambio de estadio perjudicó al Millo.
“La final se tiene que jugar en nuestro país”.
“River es un buen equipo. Boca no es vistoso,pero tiene mucho gol. El domingo, Independiente jugó mejor y en una jugada Boca lo ganó. Boca no necesita jugar bien para meter un gol. Pasó en la ida de la final con goles de Wanchope y Benedetto. Boca de la nada se encuentra con un gol, incluso cuando da la sensación de que juega mal”, agregó.
Por otra parte, el exmediocampista de Argentinos Juniors manifestó que el encuentro perdió identidad y que el mismo tendría que llevarse a cabo en Argentina y no en el exterior:“La final de la Libertadores ya no es lo mismo, por más que el domingo voy a querer que gane Boca. Se tiene que jugar en nuestro país, nos quitaron la final, se juega en otro país.Va a ser el amistoso más caro de la historia”.