Es extraño hablar de posibles refuerzos para River en pleno mes de abril y con todas las competencias disputándose, pero hay un nombre que desvela a los hinchas y a los dirigentes desde hace un tiempo que es el de Nicolás Otamendi. El defensor termina su contrato el 30 de junio con el Benfica y en Nuñez sueñan con tenerlo jugando seis meses la Copa Libertadores, siempre y cuando River pase a octavos de final claro está.

Confeso hincha de River, la posible llegada de Nicolás Otamendi se imagina partiendo de la base del fanatismo, pero no es lo único que importa. El principal impedimento es económico: su contrato en Portugal es altísimo para el fútbol argentino y el defensor, en caso de verse seducido por River, deberá resignar una suma importante de dinero.

Quien se pronunció al respecto sobre el tema fue Enzo Francescoli, manager del Más Grande. No solo que le puso paños fríos a la cuestion sino que también le pasó toda la responsabilidad al jugador: “Lo de Otamendi es un deseo suyo y nuestro, pero el contrato de Benfica es demasiado para River, y para el fútbol argentino“, aseveró en diálogo con Madero Sports.

Los que vienen de afuera saben que depende de ellos. El fútbol argentino está en la lucha. No depende solo de las ganas de River reforzar el equipo”. Las cartas están sobre la mesa. El Millonario se estirará todo lo que pueda, pero Otamendi deberá ceder en caso de entablar una negociación formal, algo que todavía no ocurrió.

¿Otamendi quiere seguir en Europa?

Según informó el reconocido periodista deportivo Fabrizio Romano, la intención del zaguero campeón del mundo sería seguir una temporada más en el fútbol europeo. Todavía no respondió a la oferta de renovación que le hizo el Benfica y esta especulación podría jugar a favor del Millonario, siempre y cuando ese posible deseo de continuar en el Viejo Continente no tome más forma.