Gonzalo Martínez se preparó casi todo el año para este momento, sin saber que iba a poder formar parte de él. De aquella lesión de ligamentos cruzados a principios de 2023 en el Al Nassr de Arabia Saudita a ingresar en el superclásico en La Bombonera para extender su paternidad ante Boca. Chicanas, festejos alocados y todo sobre la tarde soñada del loquito más loco de Nuñez.
El Pity ingresó a los 82 minutos en lugar de Enzo Pérez, para darle aire al equipo en ese tramo final donde Boca todavía seguia asechando. Hubo demasiada patada, tumulto y empujones, por eso intervinó poco en el juego (solo nueve toques de pelota), pero poco le importó al hincha de River. Su simple presencia en La Bombonera con la banda roja fue motivo de éxtasis.
Terminado el partido y ya en la intimidad del vestuario, el 18, que había hecho su debut en River hace tan solo una semana ante Banfield, hizo estallar a todos con la frase que tiró en el vivo de Instagram de Barco: “Les rompimos el orto”, dijo sin tapujos. También, como no podía ser de otra forma, fue actor principal de las mejores fotos de la jornada.
Protagonizó un divertido cruce con Nacho Fernández en Instagram y festejó como un desaforado en el vestuario, saltando, golpeando el techo y haciendo todo tipo de gestos. Es tal el respeto que Boca le tiene al autor del tercero en Madri que apenas hubo silbidos cuando ingresó a la cancha en el complemento. Los tiene de hijos para siempre.