Juan Fernando Quintero vivió los mejores años de su carrera deportiva con la camiseta de River. Si bien su adaptación al fútbol argentino demandó varios meses y hasta llegó al Millonario con ciertas dudas por su contextura física, el enganche colombiano terminó pagando con su magia, con asistencias y goles inolvidables todas las expectativas que se depositaron con el.
En diálogo con Clank!, el espacio de Juan Pablo Varsky, el crack colombiano reveló detalles de cómo se produjo su arribo al Más Grande. “Cuando llegué a River estaba muy enfocado. Le dije a mi familia que no quería desperdiciar ese momento de mi carrera. Le dije a la mamá de mi hija que no se lo tomara personal, pero necesitaba estar 100% enfocado solo en jugar y por eso en ese primer momento se quedaron con mi hija en Colombia”, afirmó Juanfer.
“Esa decisión de venir solo me sirvió mucho. Me la jugué, y por suerte ella lo entendió”, agregó el futbolista oriundo de Medellín. Y explicó cuál era su propósito: “Traje a uno de mis primos y a mi mejor amigo para que solamente me ayuden a entrenar, descansar, y al otro día volver a entrenar a un nivel de exigencia total con Marcelo. Tenía que ser exitoso, y eso me llevó a ser ermitaño. Ni bien llegué a Argentina me criticaron mucho, porque decían que estaba excedido de peso, y por eso dije que no era gordo, sino que era nalgón”, reconoció.
Por su parte, Quintero contó con quiénes estableció un contacto más cercano en sus primeros meses en River, en pleno proceso de adaptación: “Con Rodrigo Mora tuve una relación especial desde siempre. Cuando llegué fue uno de mis grandes sostenes. Después se juntó Nico De La Cruz y armamos como nuestro grupito más cercano, sin dejar de ser cercano a los otros. También se sumaban Montiel, Martínez Quarta y Palacios. Era un grupo hermoso que nos juntábamos bastante”, reveló.
Juanfer y el recuerdo de las finales contra Boca
El gol de Juan Fernando Quintero en el Estadio Santiago Bernabéu es uno de los momentos más importantes de la historia de River. Para algunos, es el gol más trascendenal del Más Grande. Sin embargo, el colombiano cree que el partido que marcó un antes y un después fue el que disputaron en Mendoza, en marzo del mismo año.
“El 2018 no lo arrancamos bien”, afirmó Juanfer Quintero. “Fue difícil porque no le encontrábamos la vuelta, pero ahí es donde hubo un click en el grupo. A veces hay que tocar fondo para reaccionar. Y todos tuvimos claro que esa primera final contra Boca en Mendoza era el partido para salir adelante”, expresó el colombiano.
Aquel encuentro en el Estadio Malvinas Argentinas de Mendoza fue el puntapié de un año inolvidable para River, que culminaría con la final en Madrid y un festejo épico en el Bernabéu: “Teníamos una oportunidad grandísima y por suerte lo aprovechamos, aunque en ese momento no sabíamos que era el 10% de todo lo que venía después en diciembre. Ahí marcamos la diferencia contra ellos y después reaccionamos con un invicto impresionante a lo largo del año”, cerró Juanfer.